I got to get back, yeah,
back to the west coast.
Oh I'll miss, yeah
I'll miss your face though.
So I won't even say it,
with you I couldn’t fake it.
Friday, July 26, 2013
Lees a Machado.
Y de repente lo sientes.
Y da igual que al principio te sintieras reacia.
Que pensaras que no podría ser.
Que hacía demasiado frío.
Que la tierra era demasiado árida.
Que la comarca estaba demasiado despoblada.
Caminaste por los caminos por los que él caminó.
Entre los mismos árboles,
por la misma rivera.
Sus palabras resonaban en tu mente,
y no podías dejar de sonreír.
Pensaste que cualquiera podría inspirarse
en una tierra así.
Y era verdad.
Ahora, no hay manera de vivir
sin volver a ese lugar.
Sin sentir lo que sentiste,
de golpe y sin previo aviso.
Y en ese pueblito desplobado,
plantaste las raíces sin apenas darte cuenta.
Y hay algo allí que siempre dejas,
que ya siempre se quedará.
Y hay algo que siempre te llevas,
que siempre te vas a llevar.
Son los colores claros,
los atardeceres de otro color,
las estrellas que todo lo invaden,
el silencio desgarrador,
son los pájaros que te despiertan,
las noches que son eternas,
las sonrisas diferentes,
y las ganas de volar.
Son el cielo y la tierra,
y el horizonte al que nunca llegas.
Caminos de piedra,
en los que cantas al caminar.
Es casi tocar el cielo,
es darte toda la vuelta,
es llegar a la esencia,
inspirarte de verdad.
Y de repente lo sientes.
Y da igual que al principio te sintieras reacia.
Que pensaras que no podría ser.
Que hacía demasiado frío.
Que la tierra era demasiado árida.
Que la comarca estaba demasiado despoblada.
Caminaste por los caminos por los que él caminó.
Entre los mismos árboles,
por la misma rivera.
Sus palabras resonaban en tu mente,
y no podías dejar de sonreír.
Pensaste que cualquiera podría inspirarse
en una tierra así.
Y era verdad.
Ahora, no hay manera de vivir
sin volver a ese lugar.
Sin sentir lo que sentiste,
de golpe y sin previo aviso.
Y en ese pueblito desplobado,
plantaste las raíces sin apenas darte cuenta.
Y hay algo allí que siempre dejas,
que ya siempre se quedará.
Y hay algo que siempre te llevas,
que siempre te vas a llevar.
Son los colores claros,
los atardeceres de otro color,
las estrellas que todo lo invaden,
el silencio desgarrador,
son los pájaros que te despiertan,
las noches que son eternas,
las sonrisas diferentes,
y las ganas de volar.
Son el cielo y la tierra,
y el horizonte al que nunca llegas.
Caminos de piedra,
en los que cantas al caminar.
Es casi tocar el cielo,
es darte toda la vuelta,
es llegar a la esencia,
inspirarte de verdad.
Campos de Soria.
I
Es la tierra de Soria árida y fría.
Por las colinas y las sierras calvas,
verdes pradillos, cerros cenicientos,
la primavera pasa,
dejando entre las hierbas olorosas
sus diminutas margaritas blancas.
La tierra no revive, el campo sueña.
Al empezar abril está nevada
la espalda del Moncayo;
el caminante lleva en su bufanda
envueltos cuello y boca, y los pastores
pasan cubiertos con sus luengas capas.
II
Las tierras labrantías,
como retazos de estameñas pardas;
el huertecillo, el abejar, los trozos
de verde oscuro en que el merino pasta,
entre plomizos peñascales, siembran
el sueño alegre de infantil Arcadia.
En los chopos lejanos del camino,
parecen humear las yertas ramas
como un glauco vapor—las nuevas hojas—,
y en las quiebras de valles y barrancas
blanquean los zarzales florecidos
y brotan las violetas perfumadas.
III
Es el campo ondulado, y los caminos
ya ocultan los viajeros que cabalgan
en pardos borriquillos,
ya al fondo de la tarde arrebolada
elevan las plebeyas figurillas
que el lienzo de oro del ocaso manchan.
Mas si trepáis a un cerro y veis el campo
desde los picos donde habita el águila,
son tornasoles de carmín y acero,
llanos plomizos, lomas plateadas,
circuidos por montes de violeta,
con las cumbres de nieve sonrosada.
IV
¡Las figuras del campo sobre el cielo!
Dos lentos bueyes aran
en un alcor, cuando el otoño empieza,
y entre las negras testas doblegadas
bajo el pesado yugo,
pende un cesto de juncos y retama,
que es la cuna de un niño;
y tras la yunta marcha
un hombre que se inclina hacia la tierra,
y una mujer que en las abiertas zanjas
arroja la semilla.
Bajo una nube de carmín y llama,
en el oro fluido y verdinoso
del poniente las sombras se agigantan.
V
La nieve. En el mesón al campo abierto,
se ve el hogar donde la leña humea,
y la. olla al hervir borbollonea.
El cierzo corre por el campo yerto,
alborotando en blancos torbellinos
la nieve silenciosa.
La nieve sobre el campo y las caminos,
cayendo está como sobre una fosa.
Un viejo acurrucado tiembla y tose
cerca del fuego; su mechón de lana
la vieja hila, y una niña cose
verde ribete a su estameña grana.
Padres los viejos son de un arriero
que caminó sobre la blanca tierra,
y una noche perdió ruta y sendero,
y se enterró en las nieves de la sierra.
En torno al fuego hay un lugar vacío,
y en la frente del viejo, de hosco ceño,
como un tachón sombrío
—tal el golpe de un hacha sobre un leño—.
La vieja mira al campo, cual si oyera
pasos sobre la nieve. Nadie pasa.
Desierta la vecina carretera,
desierto el campo en torno de la casa.
La niña piensa que en los verdes prados
ha de correr con otras doncellitas
en los días azules y dorados,
cuando crecen las blancas margaritas.
VI
¡Soria fría, Soria pura,
''cabeza de Extremadura'',
con su castillo guerrero
arruinado, sobre el Duero;
con sus murallas roídas
y sus casas denegridas!
¡Muerta ciudad de señores,
soldados o cazadores;
de portales con escudos
de cien linajes hidalgos,
y de famélicos galgos,
de galgos flacos y agudos,
que pululan
por las sórdidas callejas
y a la medianoche ululan,
cuando graznan las cornejas!
¡Soria fría! La campana
de la Audiencia da la una.
Soria, ciudad castellana,
¡tan bella! bajo la luna.
VII
!Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno a Soria, oscuros encanares,
ariscos pedregales, calvas sierras,
caminos blancos y álamos del río,
tardes de Soria, mística y guerrera,
hoy siento por vosotros, en el fondo
del corazón, tristeza,
tristeza que es amor! ¡Campos de Soria,
donde parece que las rocas sueñan,
conmigo vais! ¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas!...
VIII
He vuelto a ver los álamos dorados,
álamos del camino en la ribera
del Duero, entre San Polo y San Saturio,
tras las murallas viejas
de Soria—barbacana
hacia Aragón, en castellana tierra—.
Estos chopos del río, que acompañan
con el sonido de sus hojas secas
el son del agua cuando el viento sopla,
tienen en sus cortezas
grabadas iniciales que son nombres
de enamorados, cifras que son fechas.
¡Álamos del amor, que ayer tuvisteis
de ruiseñores vuestras ramas llenas;
álamos que seréis mañana liras
del viento perfumado en primavera;
álamos del amor cerca del agua
que corre y pasa y sueña,
álamos de las márgenes del Duero,
conmigo vais, mi corazòn os lleva!
IX
¡Oh!, sí, conmigo vais, campos de Soria,
tardes tranquilas, montes de violeta,
alamedas del río, verde sueño
del suelo gris y de la parda tierra,
agria melancolía
de la ciudad decrépita,
me habéis llegado al alma,
¿o acaso estabais en el fondo de ella?
¡Gentes del alto llano numantino
que a Dios guardáis como cristianas viejas,
que el sol de España os llene
de alegría, de luz y de riqueza!
Es la tierra de Soria árida y fría.
Por las colinas y las sierras calvas,
verdes pradillos, cerros cenicientos,
la primavera pasa,
dejando entre las hierbas olorosas
sus diminutas margaritas blancas.
La tierra no revive, el campo sueña.
Al empezar abril está nevada
la espalda del Moncayo;
el caminante lleva en su bufanda
envueltos cuello y boca, y los pastores
pasan cubiertos con sus luengas capas.
II
Las tierras labrantías,
como retazos de estameñas pardas;
el huertecillo, el abejar, los trozos
de verde oscuro en que el merino pasta,
entre plomizos peñascales, siembran
el sueño alegre de infantil Arcadia.
En los chopos lejanos del camino,
parecen humear las yertas ramas
como un glauco vapor—las nuevas hojas—,
y en las quiebras de valles y barrancas
blanquean los zarzales florecidos
y brotan las violetas perfumadas.
III
Es el campo ondulado, y los caminos
ya ocultan los viajeros que cabalgan
en pardos borriquillos,
ya al fondo de la tarde arrebolada
elevan las plebeyas figurillas
que el lienzo de oro del ocaso manchan.
Mas si trepáis a un cerro y veis el campo
desde los picos donde habita el águila,
son tornasoles de carmín y acero,
llanos plomizos, lomas plateadas,
circuidos por montes de violeta,
con las cumbres de nieve sonrosada.
IV
¡Las figuras del campo sobre el cielo!
Dos lentos bueyes aran
en un alcor, cuando el otoño empieza,
y entre las negras testas doblegadas
bajo el pesado yugo,
pende un cesto de juncos y retama,
que es la cuna de un niño;
y tras la yunta marcha
un hombre que se inclina hacia la tierra,
y una mujer que en las abiertas zanjas
arroja la semilla.
Bajo una nube de carmín y llama,
en el oro fluido y verdinoso
del poniente las sombras se agigantan.
V
La nieve. En el mesón al campo abierto,
se ve el hogar donde la leña humea,
y la. olla al hervir borbollonea.
El cierzo corre por el campo yerto,
alborotando en blancos torbellinos
la nieve silenciosa.
La nieve sobre el campo y las caminos,
cayendo está como sobre una fosa.
Un viejo acurrucado tiembla y tose
cerca del fuego; su mechón de lana
la vieja hila, y una niña cose
verde ribete a su estameña grana.
Padres los viejos son de un arriero
que caminó sobre la blanca tierra,
y una noche perdió ruta y sendero,
y se enterró en las nieves de la sierra.
En torno al fuego hay un lugar vacío,
y en la frente del viejo, de hosco ceño,
como un tachón sombrío
—tal el golpe de un hacha sobre un leño—.
La vieja mira al campo, cual si oyera
pasos sobre la nieve. Nadie pasa.
Desierta la vecina carretera,
desierto el campo en torno de la casa.
La niña piensa que en los verdes prados
ha de correr con otras doncellitas
en los días azules y dorados,
cuando crecen las blancas margaritas.
VI
¡Soria fría, Soria pura,
''cabeza de Extremadura'',
con su castillo guerrero
arruinado, sobre el Duero;
con sus murallas roídas
y sus casas denegridas!
¡Muerta ciudad de señores,
soldados o cazadores;
de portales con escudos
de cien linajes hidalgos,
y de famélicos galgos,
de galgos flacos y agudos,
que pululan
por las sórdidas callejas
y a la medianoche ululan,
cuando graznan las cornejas!
¡Soria fría! La campana
de la Audiencia da la una.
Soria, ciudad castellana,
¡tan bella! bajo la luna.
VII
!Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas
por donde traza el Duero
su curva de ballesta
en torno a Soria, oscuros encanares,
ariscos pedregales, calvas sierras,
caminos blancos y álamos del río,
tardes de Soria, mística y guerrera,
hoy siento por vosotros, en el fondo
del corazón, tristeza,
tristeza que es amor! ¡Campos de Soria,
donde parece que las rocas sueñan,
conmigo vais! ¡Colinas plateadas,
grises alcores, cárdenas roquedas!...
VIII
He vuelto a ver los álamos dorados,
álamos del camino en la ribera
del Duero, entre San Polo y San Saturio,
tras las murallas viejas
de Soria—barbacana
hacia Aragón, en castellana tierra—.
Estos chopos del río, que acompañan
con el sonido de sus hojas secas
el son del agua cuando el viento sopla,
tienen en sus cortezas
grabadas iniciales que son nombres
de enamorados, cifras que son fechas.
¡Álamos del amor, que ayer tuvisteis
de ruiseñores vuestras ramas llenas;
álamos que seréis mañana liras
del viento perfumado en primavera;
álamos del amor cerca del agua
que corre y pasa y sueña,
álamos de las márgenes del Duero,
conmigo vais, mi corazòn os lleva!
IX
¡Oh!, sí, conmigo vais, campos de Soria,
tardes tranquilas, montes de violeta,
alamedas del río, verde sueño
del suelo gris y de la parda tierra,
agria melancolía
de la ciudad decrépita,
me habéis llegado al alma,
¿o acaso estabais en el fondo de ella?
¡Gentes del alto llano numantino
que a Dios guardáis como cristianas viejas,
que el sol de España os llene
de alegría, de luz y de riqueza!
Antonio Machado
Thursday, July 25, 2013
Wednesday, July 24, 2013
He saw the moon low in the sky now. The moon there, and the light of the moon caused by what? By the sun, of course. And what lights the sun? Its own fire. And the sun goes on, day after day, burning and burning. The sun and time. The sun and time burning. Burning. The river bobbled him along gently. Burning. The sun and every clock on the earth. It all came together and became a single thing in his mind. After a long time of floating on tea land and a short time of floating in the river he knew why he must never burn again in his life.
A nuestros padres les importaba un carajo los moretones, la sangre y las torceduras; lo terrible, lo imperdonable, era hacerse un agujero en las rodilleras de los pantalones. Porque sólo había dos pares de pantalones para cada chico: los de diario y los de domingo, y nunca podías hacerte un agujero en uno de los dos pares porque eso mostraba que eras pobre y gilipollas, y eso quería decir que tus padres eran pobres y gilipollas también. Así que aprendías a placar a un tío sin caerte sobre ninguna de tus rodillas. Y el tío aprendía a ser placado sin caerse sobre ninguna de sus rodillas.
Tuesday, July 23, 2013
Sólo es viento.
Un vendaval,
que se lleva lo soñado por delante.
No pasa nada.
Siempre estarás en ese lugar.
No puedo perderte.
Estás dentro de mí.
Y para siempre.
Le doy al play,
y suena esa canción.
Eran las últimas semanas.
Caminábamos por el lado izquierdo de esa calle.
Me acuerdo del momento.
Te lo dije y te reíste.
Me quedo con esa sonrisas,
con ese vacile.
Estás en cada conversación,
en cada suspiro,
en cada cerrar de ojos.
En cada dolor de pecho,
en cada intento de que no duela respirar.
No pasa nada.
Sólo es viento.
Un vendaval que nos lleva por delante,
pero que nunca nos podrá tumbar.
Porque en ese lugar de la memoria,
estaremos siempre,
bailando como aquella primera noche.
Un vendaval,
que se lleva lo soñado por delante.
No pasa nada.
Siempre estarás en ese lugar.
No puedo perderte.
Estás dentro de mí.
Y para siempre.
Le doy al play,
y suena esa canción.
Eran las últimas semanas.
Caminábamos por el lado izquierdo de esa calle.
Me acuerdo del momento.
Te lo dije y te reíste.
Me quedo con esa sonrisas,
con ese vacile.
Estás en cada conversación,
en cada suspiro,
en cada cerrar de ojos.
En cada dolor de pecho,
en cada intento de que no duela respirar.
No pasa nada.
Sólo es viento.
Un vendaval que nos lleva por delante,
pero que nunca nos podrá tumbar.
Porque en ese lugar de la memoria,
estaremos siempre,
bailando como aquella primera noche.
Monday, July 22, 2013
Y el tic-tac de sus tacones era la mejor melodía.
El olor a tabaco en su pelo,
el perfume por el que cualquier idiota pagaría.
No tenía patria, ni bandera.
Ninguna foto,
bajo el plástico de la cartera.
Fiel a la soledad.
hacía el amor con las estrellas.
Nadie sabía llegar.
Era terreno prohibido,
la tierra de nadie que nunca se llega a conquistar.
Y así,
con el mundo a sus pies,
navegaba sin rumbo,
entre arrabales y callejas,
en las que sólo los gatos
parecían verla de verdad.
El olor a tabaco en su pelo,
el perfume por el que cualquier idiota pagaría.
No tenía patria, ni bandera.
Ninguna foto,
bajo el plástico de la cartera.
Fiel a la soledad.
hacía el amor con las estrellas.
Nadie sabía llegar.
Era terreno prohibido,
la tierra de nadie que nunca se llega a conquistar.
Y así,
con el mundo a sus pies,
navegaba sin rumbo,
entre arrabales y callejas,
en las que sólo los gatos
parecían verla de verdad.
Intentando descubrir el lado oculto de tu falda. Tu culo es el aire que me falta. ¿Dónde te metes a estas horas? Es tarde en esta habitación, y el aire se carga de suspiros llenos de alquitrán. Necesito estrellarme contra el filo de tu boca. Mi cuerpo te pertenece, tú toca, toca, despacio, las cuerdas de mi guitarra y enrédate conmigo. Quiero deslizarme hasta el vértice de tu ombligo. Navegando entre tus pecas, verás mis velas llegar, anhelando naufragar entre tus mares, mientras bailan al son de la canción que sólo tú sabes. Tu cuerpo brilla a la luz de las estrellas, y es la primera vez que no quiero irme con ellas. Eres tan efímera que te toco y ya no estás. Es un intento, es un rozar. Nunca te atrapo, no te metes en mi cama. No puedo verte dormir, ni respirar tus mañanas. Más fugaz que un pestañeo, el tic- tac de un taconeo, que me vuelve loca. Eres mi tormenta, mi huracán... la llama que enciende mis gotas. Eres la manzana. Un trago de pasión que te quema la garganta. Eres el temblor de tierra, el nudo en el estómago. La mancha de carmín, el botón desabrochado. Un amago interminable. Un gemido insoportable.
Un polvo a medias.
Sunday, July 21, 2013
You know the world is going crazy when the best rapper is a white guy, the best golfer is a black guy, the tallest guy in the NBA is Chinese, the Swiss hold the America's Cup, France is accusing the U.S. of arrogance, Germany doesn't want to go to war, and the three most powerful men in America are named "Bush", "Dick", and "Colin." Need I say more?
So, we’ll go no more a roving
So late into the night,
Though the heart be still as loving
And the moon be still as bright.
For the sword outwears its sheath,
Arid the soul wears out the breast,
And the heart must pause to breathe,
And love itself have rest.
Though the night was made for loving,
And the clay returns too soon,
Yet we’ll go no more a roving
By the light of the moon.
So late into the night,
Though the heart be still as loving
And the moon be still as bright.
For the sword outwears its sheath,
Arid the soul wears out the breast,
And the heart must pause to breathe,
And love itself have rest.
Though the night was made for loving,
And the clay returns too soon,
Yet we’ll go no more a roving
By the light of the moon.
Venecia, 1817.
Lord Byron.
Saturday, July 20, 2013
Friday, July 19, 2013
Una canción a medio hacer.
Recuerdos de un ayer que nunca olvido.
Ese día.
Cualquier otro.
Siempre aleatorio.
Sin sus ojos el mundo es mucho más feo.
Sin la mancha blanca de su hocico.
La soledad ya no me da miedo.
Me acostumbré a estar sin ella.
Y nunca nada dolió más que eso.
Nunca nada dolió más que eso.
Recuerdos de un ayer que nunca olvido.
Ese día.
Cualquier otro.
Siempre aleatorio.
Sin sus ojos el mundo es mucho más feo.
Sin la mancha blanca de su hocico.
La soledad ya no me da miedo.
Me acostumbré a estar sin ella.
Y nunca nada dolió más que eso.
Nunca nada dolió más que eso.
Lo sé, lo sé.
Dicen que estoy como una regadera.
El caso es que la noche me confunde
Y quiero repoblar con flores
todas las aceras.
Lo sé, lo sé.
Quizá no hemos ganado la partida,
pero como a nadie le amarga un dulce,
le puse azúcar a los golpes que me dio la vida.
Y quiero hacer lo mismo que Amelie le hizo al tendero..
Dicen que estoy como una regadera.
El caso es que la noche me confunde
Y quiero repoblar con flores
todas las aceras.
Lo sé, lo sé.
Quizá no hemos ganado la partida,
pero como a nadie le amarga un dulce,
le puse azúcar a los golpes que me dio la vida.
Y quiero hacer lo mismo que Amelie le hizo al tendero..
Marwan
Thursday, July 18, 2013
La poesía no te sirve,
te hace daño.
No estás para leer
una de esas historias de amor
que te hacen querer ser
la protagonista de un libro.
Las palabras se me rompen
en las manos
y no consigo ponerle
nombre a lo que sea
que esté sintiendo.
Quizá he dejado de creer.
O sólo quiero engañarme,
y creer que ya no creo.
te hace daño.
No estás para leer
una de esas historias de amor
que te hacen querer ser
la protagonista de un libro.
Las palabras se me rompen
en las manos
y no consigo ponerle
nombre a lo que sea
que esté sintiendo.
Quizá he dejado de creer.
O sólo quiero engañarme,
y creer que ya no creo.
Wednesday, July 17, 2013
Al final es un huracán.
Una tormenta.
Una ola que te arrastra sin remedio,
a chocarte con la orilla.
Al final es un tornado.
Un terremoto.
Un chaparrón que cae
de pleno sin darte
tiempo a resguardar.
Pero vale la pena mojarse.
¿No?
Al final es un volcán.
Que explota y te abrasa
sin opción a escapar.
Pero vale la pena quemarse.
¿No?
Sí, vale la pena quemarse.
Una tormenta.
Una ola que te arrastra sin remedio,
a chocarte con la orilla.
Al final es un tornado.
Un terremoto.
Un chaparrón que cae
de pleno sin darte
tiempo a resguardar.
Pero vale la pena mojarse.
¿No?
Al final es un volcán.
Que explota y te abrasa
sin opción a escapar.
Pero vale la pena quemarse.
¿No?
Sí, vale la pena quemarse.
Monday, July 15, 2013
Sunday, July 14, 2013
Saturday, July 13, 2013
¿Cuantas palabras necesitas para plasmar un sentimiento?
Si no hay manera.
Un grito desgarrador,
dos lágrimas,
no sé cuantos silencios.
Golpes secos a la pared,
o a la mesa.
Un buceo constante
bajo sábanas
tejidas a base de recuerdos.
Una sonrisa fingida.
La mirada fija en el infinito.
Otro grito más.
Un intento desesperado,
por intentar camuflar,
con letras entrelazadas,
lo que sientes de verdad.
¿Y qué palabras son?
¿Qué palabras?
Qué más da,
si no hay manera.
Da igual cómo lo hagas,
no hay manera.
No habrá manera.
Si no hay manera.
Un grito desgarrador,
dos lágrimas,
no sé cuantos silencios.
Golpes secos a la pared,
o a la mesa.
Un buceo constante
bajo sábanas
tejidas a base de recuerdos.
Una sonrisa fingida.
La mirada fija en el infinito.
Otro grito más.
Un intento desesperado,
por intentar camuflar,
con letras entrelazadas,
lo que sientes de verdad.
¿Y qué palabras son?
¿Qué palabras?
Qué más da,
si no hay manera.
Da igual cómo lo hagas,
no hay manera.
No habrá manera.
Friday, July 12, 2013
Wednesday, July 10, 2013
Miembro fantasma.
Es como si te arrancaran un puto brazo. Aunque el brazo físicamente no esté, lo sigues sintiendo. Es lo que se llama "miembro fantasma". Dicho síndrome viene a definirse así: el síndrome del miembro fantasma es la percepción de sensaciones de que un miembro amputado todavía está conectado al cuerpo y está funcionando con él. Así de simple. Me han quitado el puto brazo, pero lo sigo sintiendo. Peor aún, me sigue doliendo.
Un bolígrafo hambriento que no sabe mentir..
En algún lugar recóndito, la felicidad viaja de incógnito..
Tuesday, July 9, 2013
Monday, July 8, 2013
.
Mis personajes favoritos se han escondido,
esperando a que llegue la inspiración,
por esa ventana,
por donde sea,
si es que alguna vez llega.
esperando a que llegue la inspiración,
por esa ventana,
por donde sea,
si es que alguna vez llega.
Poema XX.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.»
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.
Escribir, por ejemplo: «La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos.»
El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.
En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.
Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío.
Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.
Pablo Neruda
Sunday, July 7, 2013
.
En mi habitación no deja de llover.
Escapo por el balcón para encontrarme
con el sol,
para intentar dejar atrás esta tristeza.
Escapo por el balcón para encontrarme
con el sol,
para intentar dejar atrás esta tristeza.
.
Las horas pasan lentas.
Intento escapar de mi cabeza,
para no encontrarme con el brillo de tus ojos.
Quiero escaparme de mí,
dejar de sentir por un segundo.
No notar que llevo en el pecho,
todo el peso del mundo.
Y sólo acaba de empezar..
Intento escapar de mi cabeza,
para no encontrarme con el brillo de tus ojos.
Quiero escaparme de mí,
dejar de sentir por un segundo.
No notar que llevo en el pecho,
todo el peso del mundo.
Y sólo acaba de empezar..
Saturday, July 6, 2013
Friday, July 5, 2013
.
No tengo fuerzas para escribir.
Y eso nunca me pasa.
Pero siento la necesidad de liberar mi alma sobre el papel.
Me duele cada recodo,
cada rincón.
Cada recuerdo,
cada suspiro.
.
Y mientras se alejaba el bus,
separándome de ti,
dibujando océanos entre los dos,
no he podido evitar sonreír entre lágrimas,
al darme cuenta,
que difícilmente,
habrá nada más bonito que tú en el mundo entero.
separándome de ti,
dibujando océanos entre los dos,
no he podido evitar sonreír entre lágrimas,
al darme cuenta,
que difícilmente,
habrá nada más bonito que tú en el mundo entero.
Y un beso que jamás se apartó de la tuya..
Y así esta carta se termina
sin ninguna tristeza:
están firmes mis pies sobre la tierra,
mi mano escribe esta carta en el camino,
y en medio de la vida estaré
siempre
junto al amigo, frente al enemigo,
con tu nombre en la boca
y un beso que jamás
se apartó de la tuya.
- Pablo Neruda
Thursday, July 4, 2013
Y tan entera.
Esa pequeña muchacha interminable,
que duerme con sus penas porque sus penas saben.
Esa mujer que guarda entre las manos
el ritmo de su sangre y de mi sangre.
Hablo de esa hembra que brilla y para que no se note
se oculta tras los focos.
La cómplice que no podrás hallar en bares ni catálogos.
La diosa descreída que va fundando entre mis dedos religiones.
La muchacha que pasa y ni no sabes verla, para qué sirven tus ojos.
Ella,que se avergüenza de estar llena de cascadas
pero íntimamente lo celebra.
Que sospecha de si misma y algunas veces se perdona.
Ese peligro sin letreros que te adviertan
de las curvas peligrosas de sus ojos.
Esa Caperucita rota y tan entera que cruza el bosque
tocando sus tambores para llamar al lobo.
Ella.
Porque se llama Ella
cuando se piensa otra.
Tú,
que conviertes precipicios
en balcones si te asomas.
Ven.
Haremos del planeta de mi cuarto
un país para aprender gozando.
Sal.
Creo que el lobo ha llegado.
Soy yo.
Y te estoy esperando.
que duerme con sus penas porque sus penas saben.
Esa mujer que guarda entre las manos
el ritmo de su sangre y de mi sangre.
Hablo de esa hembra que brilla y para que no se note
se oculta tras los focos.
La cómplice que no podrás hallar en bares ni catálogos.
La diosa descreída que va fundando entre mis dedos religiones.
La muchacha que pasa y ni no sabes verla, para qué sirven tus ojos.
Ella,que se avergüenza de estar llena de cascadas
pero íntimamente lo celebra.
Que sospecha de si misma y algunas veces se perdona.
Ese peligro sin letreros que te adviertan
de las curvas peligrosas de sus ojos.
Esa Caperucita rota y tan entera que cruza el bosque
tocando sus tambores para llamar al lobo.
Ella.
Porque se llama Ella
cuando se piensa otra.
Tú,
que conviertes precipicios
en balcones si te asomas.
Ven.
Haremos del planeta de mi cuarto
un país para aprender gozando.
Sal.
Creo que el lobo ha llegado.
Soy yo.
Y te estoy esperando.
Carlos Salem
Wednesday, July 3, 2013
Ya queda menos.
Un paso más,
pequeño pero certero,
hacia el objetivo marcado.
Si consigo escapar del gris,
habré ganado la batalla más difícil de todas.
.
Yo: Cerebro, confío en ti. No me falles mañana.
Cerebro: Dame chocolate y cállate, que la vamos a liar pero bien.
Cerebro: Dame chocolate y cállate, que la vamos a liar pero bien.
Que alguien me enseñe a domesticar las horas.
Si pudiera rebobinar las agujas del reloj,
probablemente lo haría diferente.
No quedan segundos,
van pasando,
lenta pero rápidamente,
delante de mis dedos.
Mientras intento
guardar
todo lo que no sé
en una hoja en blanco,
para aprendérmelo
sentada en la cama,
pienso,
que alguna parte
de mi cerebro
tiene que estar realmente dañada.
Para no ser capaz,
jamás,
de organizarme
medianamente bien.
Me caigo por el hueco del árbol,
y termino en el país de los desastres.
Pero no es un sueño,
es mi realidad.
Que alguien me enseñe a domesticar las horas.
Porque se van,
se me van.
Y ya no hay manera de atraparlas.
probablemente lo haría diferente.
No quedan segundos,
van pasando,
lenta pero rápidamente,
delante de mis dedos.
Mientras intento
guardar
todo lo que no sé
en una hoja en blanco,
para aprendérmelo
sentada en la cama,
pienso,
que alguna parte
de mi cerebro
tiene que estar realmente dañada.
Para no ser capaz,
jamás,
de organizarme
medianamente bien.
Me caigo por el hueco del árbol,
y termino en el país de los desastres.
Pero no es un sueño,
es mi realidad.
Que alguien me enseñe a domesticar las horas.
Porque se van,
se me van.
Y ya no hay manera de atraparlas.
Tuesday, July 2, 2013
Nada cuadra.
Nada cuadra, y yo ya no puedo más con mi cabeza, y si ayer no pude dormir, hoy mucho menos, y como llegue tarde al exam ya es lo que me faltaba, y espero que las preguntas sean sobre lo que me sé, porque si no, será un cero, y quiero llorar, y quiero salir corriendo, y hace mucho que no tenía tanto estrés, y esto de estar aquí sola es una mierda, y quiero irme a mi casa, y andar en moto con mi hermano, y bajar al sur.
.
Mi cabeza no está aquí.
Hace rato que se bajó para el sur.
No le gustan esas palabras.
Son raras, y difíciles de aprender.
No, no le gustan.
La presión en la espalda ya se empieza a notar.
No es miedo,
es aburrimiento,
y ganas de huir muy lejos.
Hace rato que se bajó para el sur.
No le gustan esas palabras.
Son raras, y difíciles de aprender.
No, no le gustan.
La presión en la espalda ya se empieza a notar.
No es miedo,
es aburrimiento,
y ganas de huir muy lejos.
.
Cuando decimos que no podemos vivir sin alguien, es mentira. Sí que podemos. El ser humano puede vivir años de secuestro en absoluta y completa soledad. El ser humano puede perderse en una selva y aguantar sin nadie, sobrevivir sin nadie Ya ha habido casos. Y es que puede más de lo que cree que puede. El instinto animal primario es demasiado fuerte. El intento de supervivencia está inscrito en nuestros genes. Así que sí, sí que podemos vivir sin ella, sin él, sin ellos. Así que sí, si que podemos vivir sin gente.
Pero no queremos.
Y esa es la gran diferencia.
Subscribe to:
Posts (Atom)