Monday, March 31, 2014

Cortándome las venas en tu alfombra.
La vida haciendo el kamikaze.
Tú nombre escrito con tiza.
para que la lluvia lo borre cuando caiga.
Y este gris.
Siempre este gris.
Y al séptimo día abrió los ojos y por primera vez vio el precipicio.
Saltó.
El mundo implosionó.
Y ella siguió cayendo.
'Menos es más', le dije. 'Quítate la ropa'.
Si me clavan un puñal,
dolerá menos.
Hay palabras que
son veneno.
- Algo no va bien.
- ¿Tú también te has dado cuenta?
- Sí.
- Es por sus ojos, ¿verdad?
- ¿Que les pasa a sus ojos?
- Que están rojos todo el rato. Ya sabes, no deja de llorar.
- Yo lo decía por su sonrisa. Ya nunca aparece.
- Sí, es bastante raro.
- ¿Y qué podemos hacer?
- No sé. Igual podemos cantarle esa canción.
- ¿Cuál, la que siempre le hace ponerse a bailar?
- Sí, eso es. Así bailará y ya no estará triste.
- ¿Crees que funcionará?
- No lo sé, ¿pero hay que intentarlo no?
Llorar tan fuerte
que se apaguen las luces.
Tan fuerte
que se caiga el cielo.
Tan fuerte tan fuerte
que el universo
se de cuenta
de que algo no va bien.
Diles que les quiero.
Sobre todo que les quiero.
Que sí,
que soy un desastre.
Que lo hice todo mal una y otra vez.
Pero que quise hacerlo bien desde el principio.
Ahora diles que me voy.
A dónde sea.
Pero diles que pensaré en ellos.
Díselo.
Y no les digas
que he estado llorando,
o que mi pecho ya no aguanta este dolor.
Sólo diles que les amo.
Sobre todo que les amo.
Y que aunque ellos no piensen nunca en mí,
cada día,
cada hora,
yo estaré pensando en ellos.
Díselo, por favor.
Que mi vida se cae a pedazos,
y que ya no puedo sujetarlos.
Que tengo que ir a encontrar
la solución,
a intentar pegarlos con cola.
A hacer de este caos
algo útil.
Y aquí no puedo.

Díselo.
Y si te dicen algo,
dímelo de vuelta.


La vida
y el daño que hace a veces.
Una niña pequeña perdida
en esta selva.
Y yo no soy como Mowgli,
yo no tengo a Balú,
no tengo a Bagira.
Sola en mi desierto,
sola en mi cuento
sin final feliz.
Sola,
ante ellos,
ante ti.
Mis demonios
riéndose a escondidas.
Y en esta caída libre
no tengo ese botón
que al final
abre el paracaídas.
Me di tantas ostias
contra el mismo asfalto
que ya me lo conozco
como la palma de mi mano.
¿Miedo?
No, no es miedo.
Es cansancio.
Y una tristeza
tan profunda
que me nubla el alma.
Me rompen en dos
con una palabra.
Me dejan temblando
en un rincón.
Lloro,
me quedo sin aire.
La vida congelada.
Se llevan el calor,
se lo llevan todo.

Y yo me quedo con esta mierda.


Sunday, March 30, 2014

Hay tantas formas de querer,
tantas personas en el mundo,
tanta locura en el viento.

Hay tantas oportunidades,
tantas posibilidades,
que el corazón
palpita
asustado.

Nunca es igual que la anterior,
ni será igual que la siguiente.
Hay veces
en las que simplemente es,
y otras,
en las que no es ni de coña.

¿Cómo te late el corazón?
¿Te deja ella sin aliento?

La vida
y su forma de hacerte temblar.
El amor riéndose
de nosotros en cada esquina,
diciéndonos en silencio:
no lo estáis entendiendo.

¿Será verdad?
¿A caso no hemos entendido nada?

Yo veo a mis padres juntos, después de tanto tiempo, y veo como mi padre mira a mi madre, y a mi te lo juro que se me queda pequeña la palabra "amor". Y a él (a mi padre) se le queda pequeño el mundo. Te lo juro, es una burrada. Y sí, amor es saltar, y cantar, y estremecerse, y que el corazón te lata más fuerte, y que te tiemblen las piernas, y toda esa movida. Y follar como si no hubiera mañana, e ir por la calle agarrados de la mano, y besarte como si el mundo fuera a implosionar, y hacerlo con el alma a flor de piel, dispuesto a quemarte, a venirte abajo, a destruirte. Dispuesto a sentir que si no es su piel, no es ninguna, si no son sus ojos no son ningunos, si no son sus labios, ya pueden irse dando media vuelta todos los demás. ¿Es eso no? O algo de eso, al menos. ¿Queréis así? ¿Cómo si os fuera la vida en ello? ¿Queréis por encima de vuestro nombre y ombligo, más allá de todo egoísmo, anteponiendo a la otra persona en las buenas y en las malas? ¿Queréis y os duele? Mis padres llevan 26 años juntos. Y yo no sé ni qué decir. Me han enseñado que el amor es estar ahí, aunque el mundo se derrumbe. Aunque lo que en realidad quieras es salir corriendo y esconderte para que nadie te encuentre. Me han enseñado que el amor es sacrificio. Dejarte parte de lo que eres en el intento, renunciar a cosas a las que nunca pensaste que podrías renunciar. Y hacerlo convencido, además. Porque por esa persona lucharías todas las guerras del mundo, y te pondrías delante de cualquier cañón. Y joder, que te lleven por delante. El amor es una herida abierta, una guerra eterna en las trincheras de la vida. El amor es sangrar, es saltar al vacío, es destruirte, es perder la cabeza, es ponerte del revés, es quedarte sin aliento, es desnudar tu alma hasta el punto de volverte transparente para la otra persona, alcanzar una vulnerabilidad tal que te da miedo, terror, pánico, y sobre todo, es incontrolable. Siempre creí en el amor a primera vista. Y sigo creyendo. Pero el enamoramiento es una movida, y luego, lo que viene después, es otra movida muy distinta. 26 años despertándote con la misma persona. ¿Serías capaz? ¿Capaz de levantarte, mirarle, y de no aburrirte nunca jamás ni por asomo de su cara? Eso es algo más. Ese nivel de compenetración con alguien, para poder pasarte tu vida entera con él, y que todos los días (a ver, todos todos es imposible), sean jodidamente geniales porque llegas de currar todo quemado, pero te espera tu puto corazón en la cocina y te sonríe y entonces piensas que la vida es cojonuda por haberte hecho ese regalo. No sé, aguantar baches, y baches, y baches, y broncas, y mierdas, y decisiones difíciles, y cambios, y más cambios, y seguir al pie del cañón, y además, hacerle un poema, y que tu hija flipe porque la quieres como si no hubieran pasado los años, pero lo que es más alucinante, sabiendo que han pasado, y sin que te importe, porque te pasarías doce vidas más con ella. Todas tus vidas. Todas sus vidas. Joder, es una puta burrada. Y yo sé que siente eso, porque leí el poema y casi lloro, y porque veo como la mira, y es alucinante. Y entonces, ¿el amor para toda la vida existe? 

¿Vosotros qué pensáis?

Sólo tenemos una vida, elegid bien amigos, elegid bien.
Y sobre todo, "amad hasta que os duela, si duele es buena señal."

Verás,
podría decirte lo jodidamente bonito que me pareces,
y lo nerviosa que me pongo cuando alguien pronuncia tu nombre,
o cuando me preguntan por ti.
Podría contarte que me paso las horas
del día pensando en qué estarás haciendo,
en cómo será tu vida,
en sí estarás sonriendo.
Podría decirte que siento
que no necesito conocerte
para caer rendida
sin remedio ante eso que tienes
que no sé exactamente qué es,
pero me pone
del revés
las putas entrañas.
Y podría decirte también
que quizá
iría andando
hasta donde estás,
si me dijeras
que al llegar
me estarías esperando.

Pero en vez de decírtelo
y hacerme vulnerable,
prefiero escribirlo y pensar
que si algún día lo lees
quizá te des por aludido,
y que como eso sería un desastre,
lo escribo
pero dejo claro
que si te das por aludido
no, no hablo de ti.

No hablo de nadie.


Friday, March 28, 2014

Estoy cansada.
Cansada de mis monstruos,
cansada de mí.

Estoy cansada.
Sólo quiero ver a mi viejo.
Y me queda una semana.

Por favor,
sólo quiero estar con él,
y que el mundo se calle.

Thursday, March 27, 2014

Recuerdo que no conseguía quedarme despierta para esperarle cuando llegaba de trabajar. Mi madre me metía en la cama, porque él solía llegar hacia las 10 y yo era demasiado pequeñita como para seguir levantada. Ah, pero no me dormía. Dormitaba, era una duermevela curiosa, en la que no conseguía conciliar el sueño hasta que oía sus llaves en la cerradura. Tenía que saber que estaba bien, que ya había llegado y que no le había pasado nada. Sino, se me hacía imposible dormir. No le veía en todo el día, y claro, yo no sabía qué pasaba ahí fuera en la calle, pero sabía que si llegaba a casa nada podía estar demasiado mal. Ese era mi momento de alivio, mi momento de saber que papá estaba en casa, y entonces todo estaba bien. Siempre tuve problemas para dormir. Y hoy en día todavía los sigo teniendo. A veces, desearía que volviera a entrar por la puerta, creándome ese estado de tranquilidad absoluto, sabiendo que si él está cerca nada malo va a pasarme. Cuanto más me alejo de él, más cuenta  me doy de la falta que me hace. De lo niña que sigo siendo en ese sentido. De que da igual cuantos años tenga, seguiré necesitándole como cuando era una cría. No sin mi padre. Jamás sin mi padre.
Creí que lo había encontrado.
Estaba equivocada.

Desapareció con la misma rapidez
de un eclipse solar.
Con la misma fugacidad
de una estrella que cae
en mitad del cielo.
Se fue,
como se van las pestañas
cuando las soplas tan fuerte
que parece que ya no te queda aire en los pulmones.


Fue el parpadeo más intenso de mi vida.
Un espejismo
que viajaba a la velocidad de la luz.
La caída libre
más disparatada.

Y en un abrir y cerrar de ojos,
la nada.
Y paró la vida de golpe
con el tic-tac de sus tacones
y el ronroneo
de su culo al caminar.

La miraron como si nunca antes hubieran visto a una mujer.
Como si la tierra se hubiera abierto
y estuvieran tocando un pedacito de infierno.

No tenía nada de ángel,
lo supieron sólo con mirarla.
Pero todos habrían estado
dispuestos
a quemarse con ella,
en ella,
por ella.

Lástima que ya tuviera dueño.
Que fuera de nadie, y de todos.
Que fuera un espejismo
que no se podía tocar.
Que desaparecía.

Si pudieras ver lo que yo veo,
si pudieras mirar con mis ojos,
entonces,
entonces lo entenderías.
Ahora lo entiendo todo.
Cuando te miro aunque estés lejos.
Tan lejos que ni siquiera sé como hueles.
El mundo del revés,
y tú a través de esa melodía.
La vida en llamas
y yo contando los días
para volver a no verte.
Que ironía.
Lo mejor es que en el laberinto
de mis palabras,
se esconde la verdad.
Salvaje
e indomable.
Mis entrañas cerradas con llave
y la vida en movimiento.
Una vez más,
una vez menos.
Y nunca es tarde hasta que lo es.
Ahora corre.

¿Alguna vez te lo has planteado? Eso de que sólo tenemos una vida y que la mayor parte de ella la pasamos con las mismas personas. ¿Como lo ves? En el mundo somos 7.000 millones o por ahí ¿no? Joder, acojona. Tiene que haber tanta gente guay. Gente con la que podría ir a los bolos que me molan, gente con la que podría hablar de literatura, gente con la que podría ir al zoo, gente con la que podría ir a recorrer el mundo en tren y con mochila. Joder, de todo. Chicas que me harían caer en la tentación. Chicos que me volverían completamente majara. Gente que me sacaría de quicio, pero que luego harían algo que me dejaría anonadada, y pensaría: joder, que grande. Gente de mil colores y sonrisas. Gente que sería como un rayo de luz entrando por la ventana a la mañana. Alguien con quien bailar a la luz de la luna. Siempre de brazo en brazo. Alguien con quien saltar en paracaídas aunque me muriera de miedo. Personas de todos los tamaños y edades. Niños con los que jugar al balón, ancianos con los que hablar de la guerra y de cómo vivían sin electricidad. Joder, es una burrada. Podría patearme todos los países, hacer amigos, conocer familias, enamorarme, desenamorarme, vivir aventuras salvajes, dormir bajo las estrellas completamente desnuda, cantar alrededor de una hoguera mientras alguien toca una guitarra en el último rincón del mundo. Hacer el indio con un esquimal. Volverme loca por un nigeriano. Aprender a hacer surf con un australiano (eso sería imposible con lo torpe que soy). Joder, hay tantas variables. Igual podría terminar viviendo en la selva y tener un chimpancé como mascota. Eso sería la ostia.

Pero luego, lo pienso, y llego a una conclusión: si tuviera otras cinco vidas, las volvería a pasar con los mismos de siempre. 
Precipicios.
Miradas y otras mierdas.
Cada vez que veo ese video,
las piernas me tiemblan un poco.
No sé si lo pillas.

¿Qué está pasando?

Wednesday, March 26, 2014

"Ya sé por qué mamá se enamoró de ti."
"Never stop and never settle but settle down for the one who let's you draw cities on their skin with the tips of your fingers. Never stop and never settle but settle down for the one who knows that some people were taught to ask for help but never who to ask. Never stop and never settle but settle down for the one who makes you want to be better. And settle down."
En las inmediaciones del corazón.
señales de stop por todas partes.
Un ceda el paso
que se saltó,
y ahora no
hay quien lo pare.

Semáforo en verde,
salta al vacío.

Tuesday, March 25, 2014

Me quedaría.
Pero no estaría aquí.
Y no hay nada peor que estar sin estar.
¿No crees?
Por eso tengo que irme.
Con esa canción en el bolsillo,
un lápiz sin afilar,
y un sueño colgado de mi mochila.
No sé si volveré,
o si estarás cuando vuelva.
No lo sé,
y tampoco quiero saberlo.

Cuando saltas,
a veces vuelas
y otras te caes.

Esperaré a ver que pasa.


A veces sale solo.
Cuando te pones una canción que te gusta de fondo,
y la vida se llena de ternura.
No sé,
a estas horas de la noche,
todo parece más mágico.
Y palpo los segundos
como si fueran
semillas de granada.

Nada extraordinario
por estos lares.
Nada pasa,
nada cambia.
Y sin embargo
la sonrisa explota
en cualquier esquina.
No me preguntes por qué.
Pero es alucinante.

La vida
y la dulzura de
las pequeñas cosas.

Esta canción me emociona.
Es mi canción.

¿Y tú qué estás haciendo?
Espero que hagas lo que hagas,
estés sonriendo.

Sino,
ya sonrío por los dos.

Y que el mundo siga girando.

Da igual todo lo que pueda escribir en un día,
nunca tengo la sensación de haber escrito demasiado.
Es como que podría pasarme todas las horas de mi vida escribiendo
y aún así nunca sería suficiente.
Algo así.
Y yo con lo que más flipo de todo, es con esa peña, que va de que sí ¿sabes? De que están ahí y todo el rollo, y luego, cuando todo es gris y no deja de lloverte mierda, no les ves ni de lejos. Gente de verdad hay tan poca que da miedo. Pero por los de verdad, joder, por esos me quemo en el infierno.
He told me, not face to face, but anyway, he told me he was never gonna want me that way. I mean, he was tryin’ to tell me he wasn’t gonna love me romantically or whatever you call it. He was seeing me like a friend, and that was gonna be all. And sometimes I wonder why the fuck we consider that less. ‘Cause now that I think about it, it’s the most beautiful thing someone could ask for. He is my friend. And that, ladies and gentleman, is the best thing a person can have: a friend. I’m so happy to have him. I feel utterly glad to have him. And I feel honoured to be called friend by him. As long as we’re friends, everything’s gonna be fine. I love him.

Monday, March 24, 2014

"Las cosas que compramos no las pagamos con dinero, las pagamos con tiempo de nuestras vidas."
" - Hasta a mí me sorprendió.
-No creo que yo llegue a entenderlo nunca. Vamos, que no tiene mucho sentido.
- Surgió sin más.
- Pero eso es lo que no entiendo, ¿cómo surgió sin más?
- Sólo... sólo me levanté un día y lo supe.
- ¿El qué?
- Pues lo que no supe seguro contigo."
- Oye, que te estoy hablando. Si ya veo que estás ocupado, mirándolas a ellas. Pero tengo algo que decirte. Deberías prestar atención. Sino te lo vas a perder.
- ¿Qué dices?
- Eso que te lo vas a perder.
- ¿El qué?
- El huracán. Lo que viene antes de la calma. Lo que se lleva los tejados por delante.
- ¿Estas loca no?
- Si, un poco. Pero no es nada grave, tranquilo. Es sólo que tú me pones nerviosa. ¿No lo has notado? Pero bueno, no quiero irme por las ramas. Quería decirte una cosa. ¿Me dejas?
- Si, si, habla.

- Vale. Te estado observando. En silencio, sin que te des cuenta. Eres muy bonito. Sobre todo me gusta el color de tus ojos, y la sonrisa que te sale cuando te poner nervioso. Como cuando te habla ella. La chica esa rubia que te gusta tanto. Se te nota porque cada vez que la ves te pones rojo, y te sale esa sonrisa de bobo, y además mueves un pie. Ella es muy bonita. Entiendo que te guste tanto. A mí también me gustaría si fuera tú. Pero no le interesas. Solo le gusta que los chicos le vayan detrás. Lo veo porque hace eso con todos. Sonreírles así, y hablarles con esa voz tan dulce, y mover así el culo cuando se va para que la miréis y os pongáis malos. Pero a ella no le gustáis. Tú no le gustas. ¿Y no lo entiendo sabes? Eres el más bonito del barrio, y seguramente de toda la ciudad. Y además cuando hablas eres muy gracioso. Eso me gusta, porque me gusta reírme ¿sabes? Eso es lo que más me gusta. Y luego también te he visto con tu perro, y le quieres un montón, y él a ti también. Y me encanta cuando le tiras palos, y el va corriendo, y tu le miras con esa cara de adoración. Hacéis un gran equipo. Y te he ido a ver al campo. Me gusta fútbol. Y me gustas tu jugando al fútbol. Y me gusta ir a verte. Y también creo que andas de una forma muy guay, y además me gusta tu camisa. Pero eso no es lo que te quería decir. Lo que te quería decir, es que creo que puedo hacerte feliz. Y se que no soy gran cosa, ni nada de eso. Para empezar no soy rubia, y mi culo no se parece nada al de esa chica. Pero estoy un poco loca, y conmigo no te vas a aburrir. Me gusta mucho bailar, bailo en la calle, en cualquier parte. También canto. No solo en la ducha quiero decir, también cuando friego, cuando estoy en mi cuarto, y también en los autobuses. Eso lo hago mucho. También sé escuchar. Me gusta que me cuenten historias, aunque hago muchas preguntas eso si. Me gusta la lluvia. Y mojarme. Y me gusta correr y darle aló. Podríamos jugar a futbol juntos. ¿No te parece genial? Y también me encantan las películas, y las palomitas, y hacer bizcochos. Te haría muchos bizcochos. Y a parte de todo esto, te escribiría canciones, y poemas, y te los leería y te cantaría, y llenaría tu vida de magia y de colores. Te lo aseguro. Ningún dia seria igual que el anterior. Todo seria como un terremoto. Un terremoto salvaje. ¿Te apuntas?
Tercer capítulo de mi proyecto Si no te gusta leer es porque no has encontrado el libro adecuado. El proyecto lo empecé vía youtube, pero como no me gusta ver mi cara, he pensado que podía seguir vía Soundcloud. Sé que no es lo mismo, que no puedo enseñar los libros, y que no es tan dinámico, pero es la única forma que he encontrado para poder seguir con esto. Además subir los vídeos a Youtube es un coñazo porque se tarda mogollón, y a Soundcloud los audios se suben enseguida. Es la primera prueba, he subido la primera que he hecho, así tal cual. Para la siguiente igual ensayo un poco, porque ha quedado muy de andar por casa, pero bueno. Me gusta mucho hacer esto. Espero que a vosotros os guste escucharlo. Aquí os dejo el link:

https://soundcloud.com/make-bing-cooper/tercer-cap-tulo-si-no-te-gusta
Y en un segundo todo se puede romper.
No quiero mirar a los lados.
Antes de la gran explosión,
házmelo despacio.

Y si el viento nos separa,
has de saber
que siempre serás
mi pequeño niño raro.

¿Bailamos?

Arrugarnos juntos.
¿Te apuntas?
Lo más bonito de ella
es su cara
cuando te mira.
Dejé de creer en el amor para toda la vida.
Pero a veces,
cuando le miro,
pienso en lo jodidamente brutal que sería
arrugarme a su lado.
Pregúntale por qué llegó tan tarde. Por qué no se dio cuenta a tiempo de que aunque no, yo no tenía tetas, lo que tenía debajo valía más que toda esa mierda. Pregúntale por qué no se dio cuenta de que cuando le miraba el resto del mundo dejaba de existir. Pregúntale por qué cogió lo mejor de mí y lo tiró a la basura. Pregúntale por qué fue tan idiota. Y si no te responde, dile que da igual. Que ya encontré a quién vio lo que había debajo de mi pecho. Que ya encontré al que se dio cuenta de cuanto valía mi puto corazón roto. Que ya encontré al que me mira como si el resto del mundo no existiera. Que ya encontré al que le doy lo mejor de mí día si día también. Porque él lo último que haría es tirarlo a la basura. Que ya encontré al que me quiere como soy, al que me ilumina cada día.

Al que aunque le fallaran todos los relojes nunca llegaría tarde.  
The power of a glance has been so much abused in love stories, that it has come to be disbelieved in. Few people dare now to say that two beings have fallen in love because they have looked at each other. Yet it is in this way that love begins, and in this way only.
― Victor Hugo, Les Misérables

Saturday, March 22, 2014

Tengo la visión desenfocada.
Los sueños borrosos.
El corazón dando patadas.

Historias para no dormir.
Para pasarme horas imaginándote.
Para pasarme horas
pensando en ti.
O algo de eso.
Revolotean.
Tus ojos en mi cabeza
como una luz que parpadea.

Y en mitad de esta
trinchera
me encuentro
con las mismas preguntas que me hice alguna vez.

No tengo rifle en la mano,
estoy desprotegida.

Sólo mi piel,
y mi verdad
sangrando delante de mí.

Si vienes,
haremos la guerra una vez más.

La paz
ya la perdí hace tiempo.
Siempre igual.
Me atasco en las horas del mediodía.
Con esos papeles encima de la mesa,
cosas que tengo que acabar para el lunes,
tedio a mansalva.

Buena música,
e intención de trasnochar.
Darle la vuelta a la nada.

Sonreír con las de siempre,
mientras las nubes nos empapan.

Sentir que aquí
todo es siempre un poco mejor.

Mi vida de color verde,
por favor.
Writing is a solitary business. It takes over your life. In some sense, a writer has no life of his own. Even when he's there, he's not really there.
- Paul Auster
- ¿Cómo puede ser?
- No me preguntes a mí. Sé cuando están enamoradas, pero no tengo ni idea de por qué se enamoran de capullos como tú.

Friday, March 21, 2014

Ilumínate en mis ojos, que se joda el sol.
Me voy a rajar el abdomen,
y voy a sacar toda esa mierda
que guardan mis entrañas.

La mitad habla de ella.
La otra mitad,
de no sé qué ostias
que se cuece por ahí.

Ya sabes,
tanto tedio,
y tú tan lejos.

Thursday, March 20, 2014

Llegué a echarle tanto de menos que el resto del mundo estaba de más.
Si no estaba él,
lo demás ya no contaba.
Llegué a echarle tanto de menos que el resto del mundo estaba de más.
Si no estaba él,
lo demás ya no contaba.
Y lo único que quiero es llegar al keli, comer pescado, hablar con mi viejo. La sencillez de la vida y su ternura. La felicidad son los pequeños detalles. 
A mí lo que me mata es no tenerla aquí conmigo.
El asfalto de esta ciudad.
Y todo el gris tragándose lo bueno.

Su culo me espera en mi sofá pa cuando vuelvo.
Eso ya no me preocupa.

Wednesday, March 19, 2014

No dura para siempre.
Nada dura para siempre.
Y ella no está.
¿Y qué coño importa toda esta mierda?

Y estas ganas de llorar partiéndome el pecho,
no sé a qué vienen.

Quizá vuelvas a ser tú,
escondido entre mis sombras,
lejos,
jodidamente lejos.

Quizá vuelva a ser ella.
Sin verme,
sin verla.
En está eterna oscuridad
que no se iluminará
con su hociquito blanco.

La vida y las espinas que te clava.
Lágrimas de amor,
de amor del bueno.

Le he llamado, y me ha dicho que nadie le había felicitado, ni mi bro, ni mi ama. Lo de mi bro me lo esperaba, es un radical que no cree en nada. Lo de mi ama también es normal, al fin y al cabo es su marido, no su aita. Me ha cogido y en su tono de voz he percibido que estaba contento. Me dice: tú eras la esperanza. Para mí todos los días son el día del padre, de mi padre, del que ha hecho de mí lo que soy, del que me lo ha dado TODO, absolutamente TODO. Me ha enseñado a ser buena persona, (él es un pedazo de pan gigante), me ha enseñado a leer, a amar la literatura, me ha hablado del mundo, de las culturas, de la gente, de política, de economía, de fútbol. Ha sido mi Google particular. Me ha protegido, me ha abrazado, me ha dicho que me quiere. Me ha recogido cuando me he caído y nunca me ha dejado tirar la toalla. Ha creído en mí cuando ni yo creía, y me ha hecho ser más fuerte. Estoy siguiendo sus pasos, porque no creo que pueda ser nada mejor que lo que es él. Y creo que siempre, desde pequeñita, en lo más profundo de mi, quise ser periodista porque él lo era. Tenía una colección de periódicos que ni os imagináis, de todo el mundo, de todos los países, una puta burrada. Y cuando mi madre me pasaba el periódico para que leyera sus artículos, me sentía tan orgullosa, la niña más feliz del planeta, porque la foto de su padre salía en ese papel gris y amarillento que olía a libertad. Y es que cuando pienso en él, se me hincha el pecho de orgullo, porque es la mejor persona que he conocido en mi puta vida entera, hijo de otra gran persona que era mi abuelo, y padre de otra grandísima persona que es mi hermano. Yo hago lo que puedo. Y hoy al llamarle me ha dicho: ni una colonia, ni una corbata, nada. Y le he dicho: aita, sabes que tienes una hija pobre, pero el día que tenga dinero, te compro un barco, o lo que quieras. Y es que no hay nada que no le daría, nada que no haría por él. Es la suerte de mi vida. La mejor persona que podría tener cubriéndome las espaldas. Y lo que le quiero, dios mío,  para cuantificar lo que le quiero necesitaría otros mil universos.
Son indirectas al filo del corazón.
Quizá algún día se de cuenta.
Tengo la suerte de tenerle. Y no sé como expresar con palabras todo lo que él significa para mí. No me sirven, se quedan cortas. Es el que me entiende, el que me cuida, el que me protege de lo malo del mundo y de la gente. El que me aconseja, el que me enseña, el que se preocupa por que esté siempre bien, el que me anima, el que me apoya, el que cree en mí, el que confía en mi capacidad de poder con esta mierda. Él conoce mejor que nadie mis malas rachas, mis angustias, mis miedos, mis caídas. Y siempre ha estado para levantarme, para hacerme sentir a salvo entre sus brazos, cuando me abrazaba y me daba un beso en la frente y me decía que todo iba a estar bien. Y entonces todo estaba bien. Lo que ha tenido que aguantar, lo que me ha aguantado. Siempre ahí, en todo momento, cuando no podía dormirme, cuando no podía soportar estar lejos de casa, sola y sin nadie con quien hablar, le llamaba a él y él estaba ahí, contándome cosas para hacerme reír, todo por mi sonrisa. Es mi ángel. Por el daría mi puta vida entera. 

Te quiero aitatxo.
Zorionak en tu día.




Volví a caer antes de darme cuenta.
Como cuando vas andando por la calle,
y alguien te avisa "cuidado con la farola" en el último momento,
pero tú ya te has chocado.

Así, de la misma manera.
Sin arnés,
sin paracaídas,
sin nada que pueda evitarme el golpe.

Porque la caída está bien
si alguien te recoge.
Pero no mola tanto
cuando te das de bruces contra el suelo.
¿O qué?

Me caigo.
Y sin remedio imploro
algo, lo que sea,
que me salve del tortazo.
"Every atom in your body came from a star that exploded. And, the atoms in your left hand probably came from a different star than your right hand. It really is the most poetic thing I know about physics. You are all stardust. You couldn’t be here if stars hadn’t exploded, because the elements – the carbon, nitrogen, oxygen, iron, all the things that matter for evolution and for life – weren’t created at the beginning of time. They were created in the nuclear furnaces of the stars, and the only way for them to get into your body is if those stars were kind enough to explode. So, forget God. The stars died so that you could be here today."

Tuesday, March 18, 2014

Léeme entre líneas.
Es ahí dónde voy dejando
pétalos de margaritas
de cuando jugaba al "me quiere no me quiere"
y toda esa movida.
Léeme entre líneas,
quizá veas tu nombre escrito con tiza,
en el corcho de esos parques infantiles
donde todo son carcajadas
y sueños en zapatillas.
Léeme entre líneas,
donde no digo nada
y lo digo todo,
siempre con tu norte en mi ventana,
sin saber qué coño pasa
con este temblor
que pone mi mundo del revés
cada mañana.
Mi centro de gravedad
en tus manos,
y la vida parpadeando
contándome secretos.
Supongo que no sé
como jugar,
siempre fui bastante torpe,
no me lo tengas en cuenta.
Tus ojos y su color,
y esa forma que tienes de reirte,
haciendo que el mundo
se olvide de lo malo,
y que todo brille.
No sé cuando seré capaz
de confesar esa debilidad
que me quema por dentro.
Te dejo mis margaritas,
y todo lo que puedo decir
sin decir nada.
Estate atento.
Léeme entre lineas.

Monday, March 17, 2014

Pero me machacan la conciencia con su fracaso en las áreas más elementales. Por ejemplo, todos los días, cuando voy al hipódromo en el coche, no hago más que sintonizar diferentes emisoras en la radio, buscando música, música decente. Pero todo lo que suena es malo, plano; no tiene vida, ni melodía, ni fuerza. Y sin embargo, algunas de esas composiciones se venden a millones, y sus creadores se consideran verdaderos Artistas. Es horrible, una horrible aguachirle que entra en las mentes de cabezas jóvenes. Les gusta. Dios mío, les das mierda y se la comen. ¿No tienen discernimiento? ¿No tienen oídos? ¿No perciben la adulteración, la ranciedad?

No me puedo creer que no haya nada. No hago más que apretar el botón, en busca de nuevas emisoras. Hace menos de un año que tengo el coche, y el botón de la radio tiene la pintura negra completamente desgastada. Se ha quedado blanco, marfileño, mirándome.

Bueno sí, está la música clásica. Al final, siempre tengo que volver a ella. Pero sé que siempre la tendré. La escucho durante 3 o 4 horas todas las noches, Aun así, sigo buscando otro tipo de música. Pero no la hay. Debería haberla. Me preocupa. Se nos ha escamoteado toda un área de nuestra existencia. Pensad en toda la gente que nunca ha escuchado música decente. No me sorprende que se les caiga la cara a pedazos, que se maten unos a otros sin pensarlo siquiera, que no tengan corazón.

Charles Bukowski
Estas coordenadas me trastornan.
Mi musa a mi derecha en el sofá.
La oscuridad asomándose por la ventana.
Sigo escribiendo.

No sé en qué rincón,
en qué dirección.
Te dejé
en alguna parte del hemisferio norte.

Latiendo en mi cabeza,
siempre latiendo en mi cabeza.

Díselo a mi musa,
ella que te tiene celos.
Porque sabe
que no, que no hay manera.

Cuenta con los dedos las veces
que me volviste loca.
No te dan las manos,
no te dan los pies.
No me da la puta vida.

Para decirte entre líneas,
que fue en septiembre.
Para decirte entre líneas
que fue en tu frente
donde estrellé
mi suerte.


A veces se ama a morir,
otras a matar.

Ellos amaban a matarse.

Y no sé por qué no puedo olvidarme
de aquella noche de septiembre.
Un libro siempre en la recámara.
Los autobuses me siguen mareando.
Y no sé dejar de reír.
A pesar de este catarro,
de mis pulmones
y mi alma,
sigo pensando que lo único que vale es la carcajada.

Sunday, March 16, 2014

"You tried your best. There is nothing more you could've done. This makes you a shining example of humanity, no matter the outcome."
"- I wish I'd met you a long time ago. When we were kids.
- It couldn't have happened any other way. It had to happen now.
- But it isn't enough time.
- It never would have been."
Llevaba una gorra de los Bulls.
Unas Nikes blancas.
Serían mínimo de la talla 48.
Unos calcetines blancos por debajo de la rodilla.
Pantalones de basket.
Una cami de 59Fifty.

Y una sonrisa que te caías de culo.

No, si cuando digo yo que tengo
un problema con los negros
y los tíos con gorra es por algo.

Los huracanes que se me forman
en la boca del estómago
no tienen nada que ver
con este temporal.

Quizá tú sepas de qué va toda esta mierda.

Saturday, March 15, 2014

Me levanto a contrapié.
En la ventana las mismas nubes de siempre.
No tengo nada que decirte,
pero quiero contártelo todo.
El más mínimo detalle
de mi paso por la tierra.
Cuantas estrellas conté
en esas noches brillantes,
donde la oscuridad dejaba ver.
Era bonito mirar al cielo
pidiendo deseos
que sabía que no se cumplirían,
pero que tenía que pedir
porque el corazón me lo pedía.
Esas luciérnagas al borde del camino.
Y esos campos tan distintos,
pero que saben tanto a casa,
que ya no puedo dejar de pensarlos.
Tú apareciendo por cualquier esquina,
y la vida a borbotones.

No entiendes que me muero
cada vez que no te veo.
Que me faltas como
falta una manta en frías noches de invierno.
Cuando todo lo que el cuerpo pide
es hacerse un ovillito
y olvidarse de que ahí fuera el mundo sigue.

Porque ahí fuera el mundo sigue.
Y a mí me faltas.


Quizá no sean horas para escribir,
pero me pongo a escribir de todos modos.
No es la inspiración,
son tus ojos en mi cabeza.
Esta mierda dando vueltas.
Y ese 'no sé' que no controlo.

¿Qué coño pasa?
Dímelo tú.

Estoy como esperando
un tren que no sé cuando va a llegar,
porque no tengo el horario,
y en la estación no hay
nadie a quien le pueda preguntar.

Esperando sin saber si alguna vez llegará.
Soñando con esa latitud.
Y ese latido.

La nostalgia a contraluz.

Friday, March 14, 2014

- Tengo pendiente decirle todo eso ¿sabes?
- ¿Decirle qué?
- Pues que me mola. A ver.
- ¿Te mola de verdad?
- Sí, joder. 
- Bien. Porque a él le molas tú.
- ¿Tú crees?
- Sí, se lo dijo al Javi.
- ¿Desde cuando?
- Desde que estabas con el Ruben.
- No jodas. ¿Y todo este tiempo?
- Sí.
- Y yo sin darme cuenta.
- Es que a ver, nunca te había molado. No entiendo nada.
- Pues nada, el otro día, en la discoteca ya sabes. No sé, tonteando y así. Y luego vino la zorra esa, la Laura tía, y quería pirarse con él yo creo, pero nada, el estaba bailando conmigo, y me invitó a una copa y tal, y ya sabes, hubo feeling.
- ¿Así que en realidad quieres con él porque la Laura le tiene echado el ojo y la quieres joder?
- No tía, a ver, me moló. Estuvimos hablando, y agusto.
- Pero si nunca habías hablado de él, y cada vez que él te dirigía la palabra le ignorabas completamente. Si decías que era el pringado del barrio joder.
- ¿Oye pero que te pasa? Hubo feeling y fuera. ¿Y además a ti qué más te da si me mola o me lo quiero tirar o lo que sea? Joder tía, ni que fuera tu hermano.
- No, no, sí a mi me la suda, ya ves. ¿Te lo vas a tirar?
- Eso espero. Aunque no creo que haya mucho problema, porque viendo como me miraba y como se acercaba a mí el otro día, de cajón, a ver.

Tragó saliva. Caminaban por la gran vía mirando escaparates. Miró al suelo e intentó respirar diez veces antes de volver a levantar la cabeza. Alicia era así. Se encaprichaba con uno y venga, a full hasta tirárselo. Desde que lo dejó con el Ruben esa era su dinámica. A ella le parecía bien. Sólo sexo, esa era la condición. Y nunca más de dos veces con el mismo. Si alguno la llamaba para quedar a cenar o lo que fuera pasaba del todo. No quería enamorarse. Quizá nunca lo hubiera hecho. Ni siquiera del Ruben. Si no no se entendía cómo había actuado así con él. ¿Habría estado enamorada? ¿Sabría de verdad qué coño era eso de que tu corazón fuera de otra persona? No lo creía. No tenía pinta de saberlo. Y era feliz así. Y se alegraba por ella. Era su colega, y quería que todo le fuera bien. Pero ahora la cosa se había puesto chunga. Le había dado con el Toño. Joder, con el Toño. Igual no había tíos en el barrio, a ver. Y en la ciudad ya ni te cuento. ¿Tenía que ser el Toño? Mira, se ponía mala sólo de pensarlo. Pero claro, nadie sabía que le molaba. Absolutamente nadie. Ni siquiera ella que era su mejor colega y se lo contaba todo. Y ahora se lo iba a tirar. ¿Y qué podía hacer? Ya no podía decir nada. Joder. Ella ya sabía que al Toño le gustaba su colega. A ver, era la más bonita del barrio con creces. Todos sabían quién era, todos querían con ella. Salía y todos se giraban para mirarla. Era una cosa de otro mundo. Ali, conocida en todo el barrio, de norte a sur, de este a oeste, por ser la más bonita y la más fácil, claro, todo había que decirlo. Había estado dos años con el Ruben, pero mientras tanto había estado con otros diez chicos más. Ya ves, no era lo que se dice una chica fiel. Pero eso daba igual. Todo eso daba igual. Ella la adoraba, joder. La quería como a una hermana. Y una cosa era saber que el Toño estaba todo colado por ella, y otra muy distinta saber que se iban a acostar. Eso ya jodía un rato. ¿Y qué podía hacer? No podía hablar con el Toño. Estaba tan loco por Ali que haría cualquier cosa por estar con ella. Aunque supiera que sólo le quería para follar, y que nunca le querría ni la mitad de lo que él la quería a ella. Y tampoco podía hablar con Ali, porque claro, ¿qué le diría? Que a ver porque se lo ocultó durante tanto tiempo, que no entendía nada, que se lo contaban siempre todo, que a ver qué pasaba. Y más marrones no. Tenía que pensar algo para evitar que aquello pasara. ¿Pero qué? De repente pensó en Laura. Quizá por ahí había algo que rascar. Ali la odiaba tanto que podía obsesionarse hasta el punto de olvidarse de todo lo demás. ¿Pero qué podía hacer? De repente se le ocurrió una idea. Se sentía ruin y rastrera por tener que recurrir a técnicas tan poco legales, pero el simple hecho de pensar en Ali besando a Toño le ponía el estómago patas arriba. Tendría que andar rápida eso sí, y por encima de todo, Ali no se podía enterar de nada. A ver cómo lo hacía.

- Tía Paula, estás todo empanada. Te digo que a ver si vamos a la cafe o pasamos.
- Por mi pasamos. Yo me piro pal keli ya que estoy cansada. ¿A la noche bajas?
- Sí, ya sabes a las once en el parque.
- Guay.

Bajó al metro a toda ostia. Estaba histérica. Nunca había hecho nada parecido, y menos a Ali. Se sentía la persona más miserable del mundo. Pero cada vez que pensaba en ellos juntos en la misma cama no podía respirar. Joder, si es que siempre le pasaba todo a ella. No podía fijarse en otro no, tenía que ser Toño. Estaba taquicárdica. Cuando bajó del metro y se dirigió a su portal la invadió una determinación total. Impediría que aquello pasara. Por sus ovarios.

Thursday, March 13, 2014

A lo mejor tuve miedo de que leyera en tu mano alguna verdad sobre mí, porque fuiste siempre un espejo terrible, una espantosa máquina de repeticiones, y lo que llamamos amarnos fue quizá que yo estaba de pie delante de vos, con una flor amarilla en la mano, y vos sostenías dos velas verdes y el tiempo soplaba contra nuestras caras una lenta lluvia de renuncias y despedidas.

- Julio Cortázar, Rayuela
Te dejo en esos sueños
en los que a veces apareces
diciendo no sé qué.

Nunca entendiste mis pesadillas,
mis miedos parpadeando a la luz de las farolas,
y mi angustia nocturna
porque la oscuridad nunca me ha gustado.

Te dejo en esos sueños,
con tus ojos marrones
y tu sonrisa a medias,
esa que nunca fue para mí,
esa que siempre fue para otra.

Te dejo porque necesito
liberarme por completo
del magnetismo inevitable
que ejerces en mi cuerpo.

No fui tuya, ni de él,
no fui de nadie.

Pero si hubiera tenido que recorrer
el mundo por ti,
ahora estaría a medio camino,
en Alaska,
en el desierto del Gobi,
o en los Andes,
clamando al cielo
por verte otra vez,
clamando al cielo
porque me hicieras daño.

Cuanta mierda
en esos campos.
Secretos que sólo sabe el viento.
Miradas que son navajas,
creando la hemorragia inevitable.
A punto de cerrarse,
mis párpados
empiezan a hablarme de ti.
Quizá vuelva a soñar contigo.

Bajo mis pies,
un remolino.
Podría decirte que desde ese momento todo se volvió borroso, desenfocado, como cuando miras por un caleidoscopio. Quizá fueron las lágrimas a deshora y ese sabor a sal en los labios que me recordaba que tú no ibas a ser quien se enredara en mi pelo, quien se parara a respirar en la peca que tengo al sur del ombligo, quien me mirara como si mis ojos fueran los únicos ojos de todo el puto planeta. No, no ibas a ser tú. Y qué decirte si pensé que tú sonrisa podría apagar todos mis miedos, y llevarme a cualquier lugar mejor, donde todo lo que tocara tuviera tu tacto y tu olor y me sintiera eternamente protegida. O algo de eso. Qué decirte si por un segundo pensé que quizá estuviéramos hechos el uno para el otro. Ya ves que tontería. Nadie está hecho para nadie. Pero quise pensar que sí. Y cuando me desperté de mi sueño tú estabas hablándome de ella. La vida y sus garras afiladas, la presión en el pecho. Y tus ojos quemando mi talón de Aquiles.

Wednesday, March 12, 2014

"Time passes. Snow falls. I miss you."
Escrito a 12/03/14

- Y entonces tía, o sea, muy fuerte, me dijo que si no follábamos que me podía pirar, que no aguantaba más así. El muy cretino, tía.
- ¡No!
- Si tía, en ese plan, y después de tantas cenas, y de todo, ya sabes, que nos íbamos de compras y todo, y no sé, así de primeras, no lo entiendo. Yo es que pensaba no sé, que me haría la cena, y me regalaría esos pendientes tan monos que vi en la tienda, ¿sabes cuales te digo? ¿Esos de oro blanco tan cucos? Y no sé, él pensando en follar. Ni un detalle ni nada. Bueno, sí, me compró el vestido y todo eso, pero no sé. Y a mí, es que no sé si me gusta ya. Porque si es así, o sea, que mal ¿no? ¿Tú que piensas tía?
- Pues que es un cerdo. A ver. ¿Qué se cree que eres una puta? 

Había estado escuchando toda la conversación y ya no podía más. Cogió aire y empezó:

- Una puta idiota, eso es lo que eres. Pero así, del todo. Todavía no entiendo qué coño es lo que ha visto Alejandro en ti. De verdad, te miro y me das asco. Aquí la única cerda que hay eres tú, que te arrimas a quien sea que tenga dinero, que lo único que te importa es su puta cartera. Pasabas de él hasta que te enteraste de que sus padres tenían pasta, y que iba a estudiar para ingeniero ¿eh?  El Álex, que se ha pasado media vida pillado por ti, hasta los huesos estaba el pobre. Me he tenido que tragar tantos bajones que ni te lo crees. ¿Y todo eso era por ti? Las borracheras y las lloreras a las seis de la mañana. Me cago en todo. De verdad, te oigo hablar y me dan ganas de vomitar. Y eso que te veía venir, que ya se lo decía, que tuviera cuidado contigo, que no eras de fiar, que eras mala gente. Pero él no tenía ojos para otra. Joder, que rabia. ¿Sabes lo que te pasa? Que tú nunca has querido a nadie, en la puta vida. No tienes ni idea de lo que es estar enamorada de alguien. Pero ni puta idea. Si de verdad te importara, si de verdad le quisieras, lo único que querrías es que te follara día sí día también, que no quisiese follar con nadie más, que te eligiera a ti para todos sus polvos. Porque él es lo que quiere, atontada. Follarte a ti y sólo a ti. Y eso significa más que unos pendientes cursis, y una cena en un sitio caro, y un puto vestido que seguro será horrible, porque anda que no tienes mal gusto jodía. Te lo digo así, te falta un hervor. Si no sabes valorar a alguien cómo Álex por lo que es y no por lo que tiene, no te lo mereces. Bueno, ni a él, ni a nadie. En realidad me das pena, porque estás vacía por dentro. ¿Y sabes qué es lo que más me jode de todo esto? Que las tías como tú, tan bonitas, y tan perfectas, y tan jodidamente idiotas, enamoráis siempre a los mejores tíos. A tíos como Álex. Y las tías como yo, tenemos que aguantar escucharos hablar mierda, y escucharles hablar de vosotras y ver cómo sufren, y apoyarles y estar ahí, cuando en realidad tendríamos que ser nosotras las que se metieran bajo sus sábanas, y tendríamos que ser nosotras las que no les dejaremos respirar de tanto follárnoslos con el corazón y el alma. Y es injusto que él esté ahora en casa rayado porque tú te piraste ayer de su casa porque eres rematadamente idiota, y que tú estés aquí hablando mierda con tu colega. Y lo peor de todo, es que soy yo a la que le escribió cuando tu le dejaste colgado, y soy yo a la que ha escrito para decirle que no venía a clase porque estaba todo rayado y no quería verte, y soy yo la que quedará luego con él para tomar unas cervezas e intentar consolarle. Espero que no vuelva a acercarse a ti. Y si no puede evitarlo, espero que seas lo suficientemente legal como para no volverte a acercar a él, porque le vas a romper el corazón de una manera irreparable, y eso no te lo pienso permitir, bonita. Y ahora bájate, que ya es tu parada.

La miró con una cara de asombro, rabia, impotencia e ira homicida que por un momento pensó que no se bajaría y que le montaría un pollo de esos "supermegafuerteosea". Pero no. Se bajaron las dos en silencio y sin mirarla. Cuando el bus arrancó pensó en Álex. Estaría en la cama todo jodido por una pava que se había pasado medio viaje de vuelta a casa hablando mierda de él. Una idiota de aquí a la luna. Que asco de gentuza. Y lo peor era que ella seguiría siendo invisible para él. La amiga que le sacaba de todas, la que se iba con él de cañas, la que jugaba con él a fútbol, la que parecía un amigo. Esa era ella. Sacó el libro que estaba leyendo y se puso a leer, intentando olvidar las injusticias del universo.

En la fila de atrás un colega de Álex que había pasado desapercibido para todas continuaba callado.


Les da miedo una vida sin casa, una vida sin playa, una vida sin coche, una vida sin tiendas, una vida sin copas, una vida sin logros, una vida sin triunfos, una vida sin marcas, una vida sin cenas, una vida sin glamour, una vida sin estilo, una vida sin pasta.

A mí,
y te lo digo desde las entrañas,
lo que me da miedo es una vida sin carcajadas.
Como si todo esto importara una mierda,
y no pintara nada en estas coordenadas.
Y seguramente así sea.
El único lector fijo que tengo
me dijo que me veía viviendo en Soria,
escribiendo
y paseando por donde Machado paseaba.
Quizá él se haya acercado más a mí que yo misma.
Y eso me asusta.
Lo que tengo claro
es que no sé dónde estaré,
ni con quién,
pero si alguien llama a mi puerta alguna vez,
estoy segura de que me encontrará escribiendo.
Y por ahora,
eso es lo único que sé.
Y es que tampoco necesito saber más.

Tuesday, March 11, 2014

A veces me hace sentirme tan
jodidamente pequeña que yo no sé que ostias.
Es cómo si no fuera nada,
como si no tuviera un corazón debajo de la carne.
Si esto es el amor que venga cupido y que me pegue con su flecha en todo el pecho
y que me destroce entera.
O algo de eso. Mierda.
Y la hubiera follado toda la noche. Y al sol le hubiera dicho que se fuera a tomar por el culo. Que ya la tenía a ella. Que lo demás no importaba. Que en mi noche eterna sus ojos eran dos faros que me llevaban siempre a buen puerto. Al refugio de su pecho, a las curvas de su cuerpo, a su calor más íntimo. Pertenecía a ese lugar más que a ningún otro sobre la faz de la tierra. Sin necesidad de mapas, pues me los sabía de memoria, recorría sus océanos de carne. La vida ardiendo y en bolas. Un mordisco al corazón de madrugada. 
Hacemos lo que podemos por salvarnos.
Pero a veces la salvación no está en nuestras manos.

Una noche de rap inolvidable
Suite Soprano puso el broche a una noche de música y buen rollo

Mikele Bustillo
Bilbao, 11 de marzo


Se había formado una cola bastante larga delante del City Hall de Barcelona. Era un sábado a la tarde, buen momento para cambiar de plan y acercarse a la sala. Hacía bastante bueno y se estaba bien. Buen ambiente en una de las calles que desemboca en la Plaza Cataluña. Chavales y chavalas de diferentes edades esperando a que abrieran las puertas. Gorras, sudaderas anchas, cigarros. Mucha expectación. Se notaban las ganas en el aire. Un público hambriento de rap esperaba pacientemente al pistoletazo de salida. El City Hall abrió a las ocho. La gente entró. Estaban preparados.

El cartel del concierto anunciaba a Trapani y a los Kefta Boyz. El primero en subirse al escenario fue Trapani. Soltando un "no he ensayado nada, a ver cómo sale", empezó a calentar. La gente fue respondiendo bien, y un crescendo en el ritmo fue animando al público. Luego Fernandito Kit-Kat, miembro de los Kefta Boyz se marcó unos temas con Trapani, y mientras la pareja lo daba todo en el escenario, los grados de la sala fueron subiendo. Cuando Trapani dejó el escenario, los Kefta Boyz tomaron el relevo. Con temas como "Leggings" y un desparpajo increíble encima del stage fueron animando a la gente. La respuesta de algunos de la primera fila fue total, y el trío se paseaba por el escenario como si hubieran nacido allí mismo. Se lo estaban pasando bien.




El siguiente en aparecer en escena no fue otro que Cheb Rüben, un plato fuerte del concierto, sin duda. Salió enchufadísimo al escenario, totalmente entregado e interactuando con el público. Se metió a la gente en el bolsillo, con temas como "Cuídate", o algunos de su último trabajo, Entelequia, como por ejemplo "Se apaga". El público respondió coreando con él los estribillos, y él se dejó la voz en el intento. Una entrega máxima de parte de un monstruo del micrófono, sin lugar a duda.




Y en esas estaba Cheb, cuando empezó a buscar a Sule B. Uno de los componentes de Suite Soprano, el grupo principal de la noche. La gente se puso nerviosa, tenía ganas de oírle. Y mientras todos miraban al escenario expectantes, el rapero entró por la puerta de al lado, y subió al escenario pasando entre la gente, rodeado de gritos de ánimo. Una vez arriba Cheb y Sule B rapearon un tema juntos, y la sala ya estaba que no se tenía en pie. La entrega del público era máxima. Estaban preparados para cualquier cosa que viniera.




Y entonces llegó lo que todo el mundo estaba esperando.  Suite Soprano aparecieron en escena y entonces la sala reventó del todo. Empezaron con el primer tema de su disco, el que justamente le da nombre al mismo, "Nada más lejos", y desde el principio hasta el final no dejaron tiempo para respirar. Con DJ Kaplan a los platos, Sule B y Juancho Marqués soltaron la artillería pesada. Rapearon todos los temas que la gente se esperaba y pedía, y no dejaron a nadie indiferente. "Soprano Files", "Made this dude", "Escribas de culto", "Amor de barrio", y un largo etc. de sus temas hicieron retumbar la sala. Además, Sule B soltó su tema en solitario "Algo de amor", y Juancho su aclamado "Tengo que abrazarte", un tema que hace vibrar y le llega mucho al público. Y por supuesto, Cheb Rüben todavía andaba por allí, para colaborar con ellos en dos temas con los que la gente se dejó la garganta "Perdidos" y "Lejos del cielo". Los tres estaban entregadísimos, y parecía que se lo estaban pasando bien. El público, desde luego, se estaba divirtiendo. Digno de remarcar fue el tema "Por los siglos" en el que Sule B dejo de rapear y ofreciéndole el micro al público fue coreado de pe a pa.

















En resumen, un gran concierto en una sala en la que los artistas y el público llegaron a una buena comunión y nadie se quedó descontento. Después de unas dos horas y media de concierto, los tres miembros de Suite Soprano se quedaron por ahí para sacarse fotos con sus fans. La gente llegó a casa con muy buen sabor de boca, y seguramente ellos también se quedaron con buena impresión del público de Barcelona. Quizá con el segundo disco que ya está en camino, Lunedi, el público barcelonés y Suite Soprano vuelvan a compartir una noche inolvidable.



"El mundo se desmorona y nosotros nos enamoramos."
Y el infierno tiene que ser algo como eso.
Un sitio sin alma, sin colores.
Sin esa música sonando.

Algo así como un domingo constante.
Uno de esos domingos sin amigos,
o sin alguien que te haga arrumacos en el sofá.
Sin tus padres hablando del mundo y sus asuntos,
sin tu hermano haciéndote rabiar.

Algo así como un gris monótono.
Una eterna promesa de que algo mejor llegará,
pero a sabiendas de que no llegará nunca.

Un desierto sin oasis.
Una flor sin aroma.
Una nube sin lluvia.
Una casa sin hogar.

Esa tierra de nadie
constante
en la que la esperanza te abandona,
porque no hay nada que esperar.

Monday, March 10, 2014

Fui consciente de la estupidez que conllevaba todo aquello. Lo absurdo de las palabras que salían de mi boca. El sin sentido que se lo tragaba todo, lo engullía.

Y me importó tan poco,
que empecé a temblar.

Me daba miedo pensar que podría estar así de loca.
Vas a mirarla y el mundo se va a caer.
En pedazos y de golpe.


No amagues nada.
Será inevitable.

Y guardo debajo de la manga
ese trocito de alma
de color naranja.

¿Pa quien lo quiera?
No,
pa quien lo pueda.
Ya te dije que la vida era más al sur.
Donde el sol ponga bonitos los corazones,
y no haya ojeras en el alma.

No sé,
en tirantes y en chancletas
la vida es más fácil.
Yo es que me despierto fuera de lugar y de mundo,
como quien sabe que hay algo más por ahí dando vueltas,
pero no consigue encontrarlo.
Agotada de tanto soñar de día,
por las noches sólo tengo pesadillas.
No sé en qué puerto me he dejado el ancla.
Ahora voy a la deriva.

Y mi flechazo con el sur es para siempre.
Yo no sé querer de otra manera.
Quiero así,
desgarrándome el alma en cada intento.

Thursday, March 6, 2014



A deshora,
siempre a deshora.
Besándote los párpados
cariño. Besándote los párpados,
agarrándote el culo,
exprimiéndote.
Quédate un rato más mi guapa,
quédate un jodido rato más.
Hagamos el amor en esta sala,
en esta sala o donde quieras.
Llévame a donde las estrellas
brillen más,
a dónde los relojes no marquen la hora,
a donde todo sea posible.
Incluso soñar.

Wednesday, March 5, 2014



Era el más guapo de esas tierras amarillas,
llenas de viñas y polvo en el asfalto.
Salíamos con la parrilla
a asar esas chuletillas
que estaban para chuparse los dedos.
Mi hermano y yo,
con él,
nuestro abuelo.
El que andaba en esa bicicleta vieja,
y siempre iba a la huerta,
y salía a pasear a su niña día sí día también.
Ahora no se acuerda de mi nombre, ni de el de ellas,
y las arrugas de su cara reflejan las durezas de su alma.
Una vida dura.
Y en nuestros corazones el recuerdo
de su voz gruñendo sin parar.
Y lo que le queremos.
A ver, atontaos,
os voy a decir algo.
Que si os coge de la mano,
y os mira de esa manera,
y os pregunta qué tal, pero de verdad,
no por decir,
porque de verdad le importa saber de tu vida,
lo que haces y no,
si estás bien o si has pillado catarro,
y todas esas cosas,
que si te canta así de sopetón
cualquier canción que le guste
con seria intención de hacerte emocionar,
aunque cante fatal y a ti no te guste
(pero eso a ella se la suda),
que si te acaricia el pelo,
y te pone apodos cariñosos,
y te escribe cosas bonitas,
de esas que salen del corazón
y molan un huevo,
y todas esas cosas,
que si te da los buenos días
y las buenas noches,
y se pregunta todo el rato qué estarás haciendo,
y si estarás bien,
y si pensarás en ella,
pero no te escribe todo el rato,
para no ser pesada,
porque sabe que te agobias,
y lo último que quiere es que estés mal,
y si le duele más tu dolor
que el suyo propio,
y además hace lo imposible
por protegerte del mundo
y de sus maldades,
y te dibuja una sonrisa
día sí y día también,
y hace que te tiemble todo
el cuerpo cuando la tienes cerca...

... entonces no sé qué coño hacéis que no la cogéis por los aires, y la lleváis a Paris o a cualquier otro lugar en el que esteis sólo los dos, pasando del mundo y de toda la mierda, y no sé que hacéis que no le preparáis la cena o el desayuno, y le decís lo bonita que está así, con su piel y desnuda, y no sé qué hacéis pasando de ella tanto, y haciendo como que os suda toda la polla, cuando en realidad, el día que venga otro y se lo curre más que vosotros, se la va a llevar, y os quedaréis con cara de idiotas, pensando que nadie os quiso así, ni os hizo la vida más bonita que ella, y qué sois unos putos gilipollas por no haberos dado cuenta antes, porque siempre os dais cuenta cuando ya está a un millón de años luz, siempre tarde, joder. Si ella se lo está currando, currároslo también, porque luego ese tiempo ya no vuelve, y no hay nada peor que arrepentirse de todo lo que podíais haber hecho y no hicisteis. Joder, si os late más fuerte el corazón, admitidlo, que no es nada malo, e intentar vivir el amor mientras dure. Que a veces, no dura nada.


Digamos que tenía un culo que ni en tus mejores sueños. Y su forma de decir las erres podía matarte.

Tuesday, March 4, 2014

Sueños que te parten en dos
 cuando te despiertas por la mañana.
Cuando el cielo está gris,
y hace frío,
y parece que nada tenga sentido.

Sueño que te parten en dos.
Que se llevan
un pedazo de tu alma.

- Perdona, se te ha caído esto.
Recogió el folio del suelo, y se lo dio.
- Gracias. - Le contestó ella. Lo cogió y lo guardo en la carpeta que llevaba. Estaba petada de papeles, y claro se le iban cayendo las cosas cada dos por tres. Para cuando levantó la mirada, la chica que lo había recogido ya se había ido.
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Estaba leyendo el periódico en la cafetería de la esquina. Siempre desayunaba allí antes de entrar a currar, porque en casa se estresaba, y prefería ir al bar, leer el periódico y respirar un poco. Café solo y un croissant. Era su desayuno habitual. A veces también tomaba un zumo de naranja, según el día. Ese día no tomó zumo. Tenía un poco de prisa. Una reunión a primera hora con los de marketing. Estaba bastante taquicárdica. Parecía que no estaban de acuerdo con la propuesta artística para los carteles. Que se fueran a la mierda. No tenían ni idea. Pero la vida funcionaba así. El que está por encima tuyo tiene derecho a todo. Y tú a tragar. Que asco de mundo. Le dio un sorbo al café mientras leía lo que había echo el Valencia. Otra vez perder, vaya panda de inútiles. Levantó la cabeza, para mirar un momento a su alrededor. La cafetería estaba bastante vacía.Todavía era muy temprano. Entonces alguien entró. Era una chica que iba vestida de traje, jodidamente impecable, con un maletín de cuero en la mano derecha, y unos tacones de unos once centímetros por lo menos. Llevaba el pelo atado en una coleta alta, y la cara levemente maquillada. Al verla, se sintió una completa mamarracha, con sus pantalones vaqueros, y su jersey de lana, y su pelo atado en un moño. La chica la saludó al entrar, y ella se quedó anonada, porque según sus cálculos mentales, no la había visto en la puta vida. La chica en cuestión se acercó a la barra del bar, pidió un zumo de naranja y un croissant y se sentó en la mesa de al lado. Sacó la tablet y empezó a teclear como una loca, mientras le daba pequeños sorbos al zumo. Y cómo la curiosidad podía con ella, giró la cabeza y le preguntó:
- Buenos días, oye, ¿nos conocemos? Es que me has saludado al entrar, pero chica, no me suenas de nada. Y como soy muy despistada y no veo bien de lejos, igual te conozco pero no me he dado cuenta.
- No, no tranquila. El otro día nos cruzamos ahí fuera, en la esquina, y se te cayó un folio al suelo. Lo recogí. Me acordaba de tu cara, por eso te he saludado.
- Ah, ostias. Vale, vale. Es que con las prisas no tuve tiempo de verte a cara, y claro yo pensaba que no te había visto en la vida. Bien, pues me quedo más tranquila. Disfruta de tu zumo.
Y se dio la vuelta para seguir leyendo el periódico.

Le temblaban las manos mientras cogía el vaso del zumo, y tuvo que dejar la tablet en la mesa. Tragó saliva dos veces, e intentó pensar en otra cosa, pero no podía. Entonces, de repente, se levantó y salió del bar. No paró hasta llegar a la oficina. Se sentó delante del ordenador, sin saludar a nadie, y se puso con las cuentas que tenía pendientes. Dios mío, que torpe era. Una sola frase, eso era todo lo que había logrado en un mes. Ni siquiera consiguió un mínimo de contacto visual. Ella sólo la habló porque se quedó extrañada, nada más. Que vergüenza tan grande. No podía concentrarse en el balance ni en nada. No se quitaba de la cabeza la escena del bar. Qué momentazo, desde luego Vaya fracaso. Pensaba que quizá una vez que empezaron a hablar conseguiría una conversación decente, pero no, nada, cero, la misma incapacidad de siempre. Había perdido tres kilos, estaba completamente descentrada en el trabajo, llevaba sin llamar a su madre más de una semana, y la tarjeta de crédito había sufrido un palo considerable. ¿Qué le estaba pasando? Nunca le había ocurrido nada igual. Estaba como obsesionada, no se la podía quitar de la cabeza. Y joder, que guapa estaba. Con ese jersey de lana de colores, y esos vaqueros ajustados. Se concentraba tanto para leer el periódico que fruncía el ceño. Le parecía irresistible.






Monday, March 3, 2014

I've fallen in love with her.
So sorry baby,
her voice is too extra-terrestrial.
You know,
I got a problem
with those kind of voices.
I spend all my days thinking of her.
This shit is insane.
I love it.
Se me descose el corazón,
en estas horas
entre el todo y la nada,
entre la nada y el todo.
No sé que sentir.
No quiero pensar.
La vida es demasiado corta
para tantas putas dudas.

Con los ojos cerrados
es mucho más fácil saltar.

Pero abrirlos luego
puede ser devastador.

Y mientras tanto,
el tic-tac volviéndome loca.

Sunday, March 2, 2014

You loved a man with more hands than a parade of beggars, and here you stand. Heart like a four-poster bed. Heart like a canvas. Heart leaking something so strong they can smell it in the street.
— Frida Kahlo

Saturday, March 1, 2014

Let me tell you something. You're beautiful. You're 15 years old, 40 years old, 87 years old. You're beautiful. You're black, you're white, you're mulatto, you're eskimo, you're asian, you're indian.You're beautiful. You're brunette, you're ginger, you're blonde, you're gray-haired. You're beautiful. You're gay, you're straigth, you're bi, you're transsexual. You're beautiful. You're tall, you're short, you're thin, you're fat. You're beautiful. You have freckles, wrinckles, dimples, moles. Whatever. You're beautiful. Don't let anybody tell you otherwise.

¿Se nos rompió el amor de tanto usarlo?
Se nos rompió el corazón
de tanto jugárnoslo.
El dolor se cuela por las rendijas.
Y a veces,
joder a veces cuesta respirar.
Me faltará todos los días de mi vida.
Deja la ventana abierta.
Aunque haga frío.
Que entre el viento
y que te ponga del revés.

¿Sientes que vuelas?
Hoy la he abrazado.
Después de seis años.
Tiene las mismas pecas,
y el mismo brillo en la mirada.
Está igual de delgada,
quizá incluso más,
y es igual de bajita.
Nada ha cambiado en ella.
Al menos, no por fuera.
La he visto venir por la acera de la panadería.
Yo caminaba por la otra,
y en cuanto la he visto aparecer,
he cruzado la calle sin pensármelo
y me he lanzado a sus brazos.
No se lo esperaba.
La he apretujado como
si fuera un cojín,
y he sonreído de aquí
a la luna y más.
Y entonces,
mirándome con esa cara
que tan bien conozco,
me ha dicho:
- Que abrazo tan lindo, dame otro.
Y yo,
conmovida,
la he vuelto a abrazar.
Tenía los ojos marrones,
como el café
o el chocolate.
Y brillaban
de una manera que no se podía definir.
Eran un océano indescifrable,
un eterno rompecabezas.

Y cuando miraba en esa dirección
el cielo se caía.
Estábamos en el Antzoki. Eran ya pasadas las 4 de la mañana, y el cansancio se me acumulaba. Yo no bebo, así que las noches a veces se me hacen largas, sobre todo cuando he pasado el día de un lado para otro. Ella sí bebe, y además tiene más marcha en el cuerpo que todo Bilbao junto. Os lo aseguro. Estuvimos bailando como si no hubiera mañana en el Consorcio, y yo desde luego ya no podía más. Y eso, en el Antzoki la música bueno, no estaba mal, pero a ratos se me hacía difícil aguantar. Cuando no ponen música que pueda bailar a veces empiezo a dormirme. Y en una de esas, después de la charla que tuvimos las dos, una de esas charlas intensas que te hacen llorar (lloré como una niña), pusieron un tema, que bueno, que me sacó todo lo bueno fuera. La miré, sonreí, y eso me bastó para ser la más feliz del mundo. Estaba bien, estaba con ella. Estaba a salvo, estaba segura. Estaba bailando, alargando la noche, celebrando un año más. Dándole una patada a los problemas y a las mierdas. Sintiéndome invencible. Y entonces lo entendí todo. Ya no puedo vivir sin ella. No hay manera.