Thursday, February 20, 2020

Llevaba toda la vida esperando este momento.

Tus pulmones golpean contra el pecho, sientes una especie de vértigo en la nuca, intuyes que tus ojos deben estar brillando, parece que no te importa. Se ha apagado el mundo y eso nunca pasa. A mí nunca me pasa. ¿Se han alineado las estrellas como canta Lana? ¿Ha sido eso? ¿Éramos los afortunados en ese salón/cocina americana que no me resultó extraño desde el momento en el que entré? No sé qué clase de brujería, no sé qué tal, no sé qué vaina, no tengo ni la más remota idea. Pero cuánta suavidad, cuánto terciopelo en movimientos, qué forma más tierna de llegar a las murallas.

Que de algodón es su tacto, que de caramelo sus ojos. Sabe a tormenta de verano, a orilla de mar, a cerezos en flor, a aguacero y hoguera. Dulce contradicción, mi miedo y mis ganas, mis ganas latiendo, ardiendo, corriendo, irrefrenablemente hacia él. Quiero decirle todo lo que me atraviesa la cabeza pero es un cervatillo, no quiero asustarle. Pienso "dios, cómo es tan bonito". Le beso. Voy a hacerlo sin palabras, todo me sobra.

Antes de irme le vuelvo a mirar a los ojos. Está en la puerta esperando a que me vaya del todo para cerrarla. Pero vuelvo para besarle otra vez. Quiero besarle otra vez. No quiero dejar de besarle. No entiendo lo que pasa. Bajo por las escaleras porque no hay ascensor. Voy rápido, no puedo perder el tren. Todo lo que acaba de pasar es imposible de asimilar en un trayecto de veinte minutos. Dejo que el viento frío de la mañana más temprana, esa a la que no estoy acostumbrada, me despeje, me despierte de un estado de euforia atrapada en las yemas de mis dedos. No me da tiempo a ponerme a rememorar todas las horas de esta noche, todas las horas de todas las noches que han pasado hasta esta noche. Una vida entera. Tengo que responder al mensaje de Whatsapp que me acaba de enviar. "Vas bien?". Llevo una vida entera sin que ningún chico me pregunte "Vas bien?" después de dejar su casa. Dos palabras, un huracán. "Acabo de llegar a la estación y estoy esperando al tren." Emoticono sonriente. Todos los emoticonos sonrientes deberían ser, todos los emoticonos del planeta y de la historia, todos lo que puedan caber en un mensaje de Whatsapp legible y que no le haga pensar que soy una cursi, una pesada, algo de lo que tenga que huir despavorido.

Que se quede cerca y que el mundo aguante. Necesito mirarle mucho más.

Es como si llevara toda la vida esperando este momento.