Thursday, December 19, 2019

THE WOMB

You started being,
little lost star.
You started being,
inside of me,
in my very flesh,
in my own scars.

What happened when the thunder broke?
What happened after midnight?

I didn't sense it,
the knock,
and I blame myself,
I blame myself,
it never seems enough.
Because it is not.

Something died that day,
something beautiful and tiny.
So tiny I couldn't acknowledge it.
So tiny I couldn't even imagine.

Something died that day,
something deep and real.
Something so mine it scares me.
Something so mine I am homeless.

The womb is a sick tree,
put out the fire,
cut the thread.

Come, whoever you are,
and break my bones until I bleed my poems.
The black vultures are eating the forgotten reminders.

The pain is real.
The touch is wounded.
I am homeless.



Saturday, December 14, 2019

ZURE BEGIEN BILA NOA

Barkatu.
Horrela hasi nahi dut eta horrela hasiko naiz.
Beste hitz guztiak apurtu,
ez dutelako balio, ezin dutelako nire dardara idatzi, nire beldurra saldu.

Barkatu.
Izar izaten ikusi zintudan eta orain zerua ikutu nahi dut.
Hori da nire kartzela eta ez du axola hor egon behar badut, zai, zai,
agian inoiz gertatuko ez den erokeriaren bat itxaroten.

Baina itxaropena beti dabil nirekin dantzan, zer nahi duzu nik egitea,
nola askatzen dut, nola utzi joaten, arnasa hartzen laguntzen badit, zauriak josten, irauten.

Nola askatzen dut, zure ideia nirekin nahi badut, gustatzen bazait, ilunabarraren antzera, ez joan oraindik, ez joan oraindik, minutu bat, ez dizut gehiago eskatzen, ez dut nahi, aske zara, ni bezala, baina ikusi zintudan, hori izan zen lege apurketa, iraultza, bihotza ametsetan jartzea.

Zerua hankaz gora.
Izarrak lurrean.
Hostoak irribarrez eta ni bueltaka.

Zure begien bila noa.



Wednesday, November 27, 2019


BROOKLYN BRIDGE MELODIES

It was at the beginning.

I used to wander through sepia tone images in my mind,
wondering where I would find you, where I would kiss you, where I would tell you about the stars in your eyes.
I used to wander, love, around the world in just one second,
and you were always there, you were always there,
everywhere and also here, in my very heart, pounding, pounding,
like a cuckoo clock, like a thunderstorm.

I would have sweetened your edges,
blowed all your nightmares away,
made you believe in miracles.
Because you were.
Because you are.

It was at the beginning.

The sailors were seeking for the sirens
and the sky was the ultimate dream. 
We were sitting in a backyard,
talking about nothing,
creating the word.

I loved you like a kid holding a crayon.

The rotten rosegardens weeped
under the moonlight.
Nobody found a way to make history.
The worn out drapes were down and the lighting bugs were long gone.
Every single drop of salt was useless.

I dreamed with neon lights and skyscrapers.
I dreamed with the city where Lorca wrote those holy words.
I dream with us being invincible.

Brooklyn, love.
That was something worth dreaming about.







Monday, November 18, 2019

PUTA

Lleva pintadas de rojo las uñas de los pies y es una puta. Con esa camiseta se le ve el sujetador, es una puta. No lleva sujetador, es una puta. Las botas hasta los muslos son de puta. El cuero es de puta. El estampado de leopardo es de puta. Lleva una minifalda demasiado mini, puta. Va demasiado maquillada, tiene las tetas operadas, se ha puesto labios. Puta, puta, puta. Está bailando moviendo el culo hasta abajo, qué puta. Todos la miran, qué puta. Perrea, puta. Twerkea, puta. Lleva tacones de aguja, puta. Va completamente borracha, puta. Está hablando con un chico, puta. Se ha atrevido a entrarle, puta. Luego que no se queje si no la toman en serio. Si la tratan mal. Si la humillan. Luego que no se queje si...

Hagamos lo que hagamos siempre hay un momento en el que un hombre piensa "puta". Hagamos lo que hagamos siempre hay un momento en el que una mujer piensa "puta". Lo segundo me duele más. Lo segundo es el abismo, la brecha, lo que nos divide y rivaliza, lo que les hace fuertes. A ellos.

Mujeres juzgando a otras mujeres que no son putas. Son mujeres. Como las putas.

- Reivindicando a las putas, que también son mujeres, que también son de las mías.


Wednesday, October 23, 2019

sigo enamorada de él.

después del nunca más, del yo no te quiero, del adiós sin despedida, del silencio de cristal, del abismo a los infiernos, de esta nada.

las calles de Madrid fueron testigo. quiero creer con todas mis ganas que algo sí fue real, que uno de esos días me viste de verdad, que alguno de esos besos sí fue fuego, que también sentiste dentro mariposas y mecheros encendiéndote la vida, que esos abrazos eran sólo para mí, que los recuerdas.

algo tuvo que ser, al menos algo, no digo todo, los mensajes de buenos días, la preocupación por la comida, la forma que tenías de hacerme sentir que todo iba a estar bien a pesar de los demonios. tus historias que nunca me cansé de escuchar, no me cansaría, todo el universo Marvel que yo no entendía, que quería entender, tu guitarra y como el resto del mundo desaparecía.


desaparecía, te lo juro.
desaparecían los miedos, las dudas, las lágrimas.
contigo el  mundo contaba el doble.


mierda, sigo enamorada de ti. hasta los huesos, hasta la sangre, hasta el último recuerdo que se me clava como alambre. sigo enamorada de ti. es lo más cierto que puedo escribir.

lo siento.




Tuesday, September 24, 2019

no es que quiera contártelo todo.
pero sí.
los problemas en el curro,
los nervios,
lo mal que se portan algunos pasajeros,
las ganas que tengo de pegarles,
como cada vez que en el aeropuerto veo a un chico con una cami de Marvel me falta un poco aire.

no es que quiera contártelo todo, pero a veces pasa algo muy gracioso y me arden los dedos por las ganas de escribirte. pero a veces veo algo que sé que te gustaría y tengo que tragar saliva. mirar para otro lado.

y no quiero que me lo cuentes todo.
pero sí.
si consigues dormir bien,
y cómo estás del estómago,
y si el trabajo es demasiado,
qué has comido hoy,
a dónde vas con tus amigos.

quiero saber si sigues teniendo esos planes
o tienes otros nuevos,
si has empezado el curso y cómo,
si ya has organizado algún viaje a la nieve,
si has vuelto a ir a un concierto de los tuyos,
cómo está tu madre,
si conseguiste hablar con tu padre,
si todo está bien.

sí, quiero que me lo cuentes todo.
quiero saber que estás feliz,
tanto que me duela que yo no forme parte de eso.
pero tanto que me llene el corazón de fuego,
de calor por tu sonrisa.

quiero contártelo todo.
como mi padre está mejor,
que he podido verle y he sonreído,
mis nuevas ideas para el futuro,
lo difícil que es el día en día en Madrid
y eso que me pasó que me hizo pequeñita.

como toqué el cielo bailando con mis amigas,
como me puse la camiseta con la que quedé contigo la primera vez,
como hablé de ti con ella,
como todo supo raro.

quiero contártelo todo.
pedirte perdón.
decirte que tenías razón.

que este silencio es un abanico de puñales.
que este echarte de menos es tan grande que me aturde.
que no pensé que cabía tanta luz en un sólo corazón.
que no calculé que sin tu voz la música se apagaría.

que no te pido nada y que no quiero inmiscuirme.

quizá sólo una tarde,
algunas palabras,
un café.

volver a reírnos como niños.






Tuesday, September 17, 2019

será cuando menos te lo esperes.
todo.
el cambio de viento y la ola.
la gran caída.

será cuando menos te lo esperes.
eso decían y eso dicen
y menos mal que hay un brillo de lentejuela después del alquitrán.
después del óxido anudado a la garganta.

nunca fue fácil, eso lo sabíamos, lo sabíamos porque nos lo habían dicho todos, absolutamente todos los que hubo antes. lo dejaron escrito en papiros, en pergaminos, en libros enormes llenos de verdades vomitadas con rabia y hambre de más. pero aún así saltamos, saltamos porque tenemos que hacerlo, saltamos porque nos arden las plantas de los pies y las pupilas, saltamos porque sentimos mariposas revolviéndonos la vida. y qué puñetero el fuego, y qué puñetero el impulso de quemarse.    porque no es fácil, nunca lo sería, pero eso no determina la inmensidad de nuestras ganas. el dolor es intrínseco a la vida. pero hay algodones de colores guardados en el armario pequeño del baño con los que te limpiaban las heridas a base de alcohol y soplidos de ternura. y hay algodones de otro tipo también, yo los he visto, los he sentido, se camuflan en sonrisas y en abrazos carne y hueso, en personas que son luz, estrellas en la tierra.

la amistad se inventó para poder con los gigantes.

será cuando menos te lo esperes.
todo.
el cambio de estación y la lluvia.
el resurgir de la risa.



Friday, August 30, 2019

he decidido celebrarte.
porque sí, porque hoy es un día tan bueno como cualquiera, porque no quiero escribir sólo penas, porque el mundo ya está muy lleno de odio e indiferencia. (y porque es 28 y mi cabeza lo sabe.)

te celebro porque existes, porque eres real y milagroso, un cúmulo de átomos extraordinariamente bello, algo que atesorar. una mezcla que no se le había ocurrido nunca antes a nadie y, de repente, triunfa allá donde va. los grumos del Cola-Cao, el postre perfecto.

eres lo más bonito que he conocido nunca, y no lo digo por decir, ni porque suene bien, ni porque lo mío sea endulzarlo todo, traer la miel y el azúcar. lo digo porque lo eres, porque lo sentí y lo sigo sintiendo, porque te vi llegar y fuiste torbellino, una jauría de estrellas, revolución. y eres bonito a todos los niveles en los que puede ser bonito un ser humano, no sé cómo explicar mejor eso, no sé qué palabras pueden hacer justicia al milagro de tu corazón latiendo por tus amigos.

joder, qué maravillosa tormenta.

me he enfadado por tonterías, te he sacado de quicio, te he vuelto loco, he hecho que quieras irte lejos, he entendido tus motivos. todos. y comprendo cada paso que das hacia el otro lado, hacia un sitio mejor, hacia una calma que yo no supe darte.

y te perdono.
te perdono el silencio y las formas,
que me mataron un poco,
me hicieron herida,
como un zapato que te encanta pero que al ponerte te roza y hace que te cuesta andar y te acabas quitando.

pero no quiero quitarte de ningún lugar, de ningún presente.
pero no es lo que quiera,
es lo que es,
y el viento llegó y nos rompió las velas,
lo que teníamos de cierto,
lo que éramos cuando nadie más estaba.

recuerdo tu cara cuando me dijiste que querías probar todas las pizzas de la carta.

todo lo que no haremos más me apuñala el corazón.






Thursday, August 1, 2019

se me cuela dentro la noche,
enciendo luciérnagas en mi pequeña habitación.
están,
puedo sentirlas,
iluminan los sueños que sólo despierta sueño.
me acompañan en un desvelo más grande que mi misma.

sigo atascada en esa página,
el recuerdo de tus ojos me desgarra,
esto no lo arregla el chocolate.

ya no me queda sal para tu nombre,
o, quizá, ya no quiera derramarla,
pero te acuno en duermevelas que me hablan de tus ojos,
del paisaje de tu nuca,
del paraíso de tu pelo.
yo quise quedarme a vivir ahí:
entre tu piel y el infinito.

luego llegó la vida
con la forma que tiene de revolverlo todo,
la rutina de los días y tus ganas de todo
menos de mí,
ese "no somos nada"
que suena a bala atravesando el tórax.

¿pero si no éramos nada entonces qué hicimos?

no sé cómo no decirte todo lo que mis átomos ya sabían.
no sé cómo no salir a buscarte.

no quiero que no estés en mi vida.
pero no sé cómo hacer para no temblar cuando te veo.

mierda.





Tuesday, July 30, 2019

Cuántos pares de ojos tendré que mirar para borrar los tuyos,
volatilizarlos.
Color miel, color hash, color corteza de árbol.
El temblor que me provocan en el esternón
y hacia el ombligo.
Todo lo que palpita en mí.

Cuánto tendré que olvidar,
quitarme de dentro,
arrancarme,
para poder mirar Madrid con ojos nuevos,
sin verte en los rincones en los que me hiciste feliz riendo.
Reír contigo.
Eso sí que era algo digno de contar.

Todo lo que no hicimos se me ha clavado en las pupilas.
No te veré ser.
Lo que íbamos a hacer y se quedó en el camino,
todos los abrazos que se ha llevado el aire,
los besos en la nuca
y ese tipo de caricia,
tu sonrisa al filo del cigarro.
El vacío tiene tu forma y olor.
Estoy enloqueciendo.

Yo, que te iba a bajar la luna,
ahora estoy en las cloacas.

Me alejo para que sonrías,
para que seas feliz,
para no llenarte la vida de desastres.

El viento entra suave y me transporta.

Te ponías a fumar en mi ventana.
Yo te miraba la espalda
y se me olvidaba respirar.





Saturday, July 20, 2019

Te adiviné en las estrellas de antes del tiempo,
cuando todo era helio y polvo esparcido por el cielo.
Te adiviné y temblé antes de nacer,
antes siquiera de existir,
de ser idea.

El espacio es infinito y sin embargo qué pequeño este oasis,
qué efímero.
La ilusión del reflejo, no saberte real,
todo lo fingido con lo que convivimos.
Y mi sangre llena de rabia y ganas advirtiéndome que algo sí fue de verdad.

Me paro ante mi sombra,
ante mi resquebrajada imagen diferida,
y sólo siento este agotamiento prehistórico,
este peso de llevarme encima.

Quiero bailar, bailar, que la música retumbe en todas las dimensiones,
agujeros de gusano, llegar a tu nacimiento y ponerle nombre a tu milagro.
Altares paganos en los que rezo matemáticas complejas, integrales para descifrar el área de tu nuca,
el magnetismo de tu piel,
esa llamada.

Te adiviné en las estrellas
porque alguien me habló de Ícaros perdidos,
con todo el brillo del cosmos en los ojos,
quemados porque venían destinados a querer volar más alto.

Supernova que me rompes en el pecho y me haces frágil,
te adivino en mis batallas de antes de dormir.

No te busco más,
te lo prometo.

Mi lado bueno es para ti.





Wednesday, July 17, 2019

Algo hace clic, las entrañas se dan la vuelta, el mundo parpadea en su asombro.
Ya no siento mariposas.

Se evapora el fuego, se apaga la ilusión,
que fue centesimal y tan efímera que casi no dio tiempo a hacerla tacto.
Estoy dejando atrás todos los recuerdos en los que sales sonriendo.

Busco que me miren con ojos de admiración,
manos que me agarren en medio del gentío,
alguien que crea que yo también soy un tesoro,
algo que merece la pena cuidar.

Busco pasión a quemarropa,
alguien que me vea llegar y abra los brazos y la boca,
que no se avergüence de mi sensibilidad
ni de mi forma de no hacer las cosas como las otras.

Yo soy ésto.
Con lo bueno, con lo malo, con lo muy malo.
Con el corazón ardiendo de ganas de hacerte feliz.

Y si no ha podido ser que no sea ni en los sueños.
Que pueda saltar al siguiente incendio con las alas preparadas para vientos diferentes.

Todas las margaritas dicen "no te quiere".
Y yo tarareo esa canción y me voy sin hacer ruido.

Como todas las veces que cerré las tapas de un libro.
He querido, he aprendido.
Ahora ya me puedo ir.







Saturday, July 13, 2019

tengo una canción en la punta de la lengua que sabe un poco a soul y un poco a nubes.
sigue sin llover y todas mis escamas se rebelan: no fui hecha para el desierto.

esta sequía del cariño, este páramo sin ellas,
este ir y venir constante bailando con la pena.
esos ojitos negros, ese back to black,
su voz guardada en una vieja botella.

sigo caminando con las suelas ya gastadas,
con el cora ya muy roto,
con las ojeras llenas de todo lo que no me deja dormir.

cuántos desvelos, cuánta tristeza,
cuántos intentos hasta llegar hasta aquí.
hasta este salto, que no sé a dónde va ni si es tangible.
mi alma a borbotones exigiendo más,
porque vine a escribir,
a hacerme sangre.

y esta ciudad es tan gigante, y yo tan mía y tan hormiga,
que sólo vuelo si el viento cambia y puedo ser algo valiente.

y es que si lo pienso bien,
tuve miedo siempre.

pero igual lo hice.














Monday, July 8, 2019

torbellinos en la boca del estómago
y cosquillas en el alma.
las mariposas me cuentan cosas que no me atrevo a escribir pero que bailo.
se me ha metido dentro el sol.

no sé a donde escaparme ni si quiero,
aunque el calor abrasador me deje marcas,
aunque yo sea de agua, pez, sirena,
sal marina en mis pupilas y en mi pelo.

me encuentro y me pierdo y quiero perderme,
y estas calles son mías y este cielo también,
y es casi como el mar pero ahí arriba,
las nubes me recuerdan que algún día va a llover.
bailaré como una niña, bailaré pisando charcos,
bailaré y me haré más libre,
no me secaré las gotas.

y mójame como mojan las mareas de la luna,
mójame como se moja cuando no se teme nada.

que me quedo,
sin paraguas ni toallas y con las ganas intactas.
esperando al maremoto
y a la risa.
esperando al oleaje.








Saturday, May 4, 2019

no puedo evitarlo, los estampados de leopardo me recuerdan tanto a Amy. hoy me los he puesto, esos pantalones, y siento un tembloroso rechazo hacia mi cuerpo.

qué será eso que tiene la tristeza que viene
cuando quiere y estallando,
rompiendo las sonrisas,
haciéndose hueco a codazos.

y se queda, ella se queda, revolotea, bucea, da vueltas alrededor de mis flaquezas
y encuentra donde hacer noche entre mis omoplatos.

indefensa ante su verdad que cae certera
me envuelvo con retales de recuerdos en los que casi sentí que sí valía,
en los que casi fui todo lo que pedían que fuera,
aunque a nadie le importara nunca que yo no quisiera esa mierda.

estoy lejos, estoy cerca, estoy en mitad de la tormenta arrancándome los gritos
que se quedaron ahogados en mi vientre,
en mis venas,
porque no tuve el coraje de enfrentarme a su rechazo.

y tampoco lo entendí.

el espejo es mi enemigo en este desierto sin cariño.

soy la niña rota a la que no le dan abrazos.

los estampados de leopardo me recuerdan tanto a Amy.






Tuesday, April 30, 2019


27 MARES

1. Tiene los ojos azules y eso es una putada.

2. Hay palabras que son cárceles con paredes de cristal y lámparas colgantes.

3. Siempre me fijo en las espaldas.

4. A veces hace frío incluso en plena primavera y creo que tiene algo que ver con que ella esté tan lejos.

5. Me habría quedado a bailar un rato más.

6. Me encantan las personas que se ponen a cantar porque sí, las que se ríen con los ojos llenos de cielos, las que son tan reales que contagian libertad.

7. En otro universo también te habría querido.

8. No puedo dejar los cereales con Cola-Cao.

9. Tienen razón, no como nada bien.

10. A veces echo tanto de menos a mi madre que sólo quiero volver a su hombro izquierdo y acurrucarme en su pecho hasta que el mundo explote.

11. Mi padre siempre jugaba con nosotros los domingos.

12. Aprendí a andar en bici y descubrí que cuesta abajo todo era más fácil.

13. Estoy hecha de lluvia.

14. Creo que el mar es el invento más bonito de la naturaleza.

15. Mi hermano es la persona a la que más admiro en el mundo. Pero no se lo digáis.

16. Ella es infinita.

17. Es mi número favorito. Lo tengo tatuado en el costado derecho.

18. Esa canción es magia.

19. Podría vivir en medio de la mierda, pero jamás sin ella cerca.

20. La distancia más corta entre sus ojos y mi boca es interminable.

21. Quiero bailar en su mirada.

22. Llega la primavera y me pone las ganas del revés.

23. No tengo la culpa de que sea tan bonito.

24. En un universo paralelo estoy mirándole a los ojos, cantándole bajito canciones que saben a él.

25. Ellas nunca me entienden. Y creo que las entiendo.

26. Soy una maraña de nervios y desastres que siempre tendrá el corazón lleno de océanos.

27. Escribo y aparece. Y toda esa mierda que no sé cómo decir pero que siento.



´

Tuesday, April 2, 2019

algo surge y, sin embargo, no sé qué, no tiene nombre solo mariposas en días de lluvia y algo de ternura, tal vez algo de risa, llamaradas, un volcán en las costillas, dulzura a flor de piel y cicatrices. pienso en caricias, cuento en abrazos, y este nudo, y este amago, y este baile en este suelo que piso a trompicones porque aún no sé muy bien hacia donde tengo que correr. si cojo el primer autobús y me largo de estas baldosas ni siquiera lo notarías. ¿a caso lo notarías? ¿a caso notarías mi no estar? la soledad es el tacto de mi risa ante el espejo roto. la soledad también son estas ganas de cantar por las esquinas. qué laberinto soy en este deshilachado ahora. sin rumbo camino como puedo, intentando no pararme a observarte demasiado. desde lejos y en sigilo, como si no. intermitentemente estás y yo soy vaho, forma intangible, tímido rayo de luz intentando rozarte. no sé como llamar a este suspiro.

la inocencia está jugando al escondite.



Wednesday, March 27, 2019

no sé dónde estás. ni cómo. no sé si sonríes, pero, joder, espero que sí. mucho. no sé si te has cambiado de gimnasio, si ahora levantas más peso, si has adelgazado. no sé los resultados de tus últimos análisis y como no me quiero preocupar pienso que todo está perfecto y que lo que el médico te dijo del azúcar sólo fue algo puntual. te decía todo el rato que comieras más fruta y verdura y tú me decías que ya comías, que era yo la que comía mal. y eso es cierto, como rematadamente mal. echo de menos que me lo digas, e intentar defenderme y vacilarnos, pero, sobre todo, saber que me lo decías porque te preocupabas por mí. eso hacía que se me calentaran los pulmones, que se fundiera un poco el hielo. te lo juro.

no sé dónde estás. ni con quién. no olvido tus ojos ni tu carcajada poniendo al revés Madrid. tu forma de andar y esa sudadera. lo mucho que odiaba que tuviera cremallera, lo bien que te quedaba. tú lo sabías. yo lo sabía también. pero cuántos vaciles. y mis trenzas y mis aros y qué choni. pero me besabas. a pesar de. y entonces sonrisas. mariposas provocando. los portales, Santo Domingo, Madrid Río. y todo lo que y luego nada.

estoy donde la tierra se junta con el cielo, con mil tormentas explotándome en el pecho, atando a una nube todo lo que sentí, evaporándolo, dejándolo ir.

a la mierda.
desde mis párpados hasta la luna soy ruina y miedo,
crisálida empañada en el ocaso.

todo duele
y todo cambia
y caigo cierta como la lluvia en abril.

yo sólo quería ser importante para ti.








Saturday, March 23, 2019

Las niñas que no tuve contigo

Tengo que arrancarme del vientre las cuatro niñas que iba a tener contigo. Creo que siguen ahí, bailando, haciendo el mono a tu manera, con pelusilla que iba a ser pelo alborotado, bucles hasta el suelo, porque tú eras todo rizos, porque yo era siempre largo - y a ellas no se lo iba a cortar por mucho que dijeran sus abuelas. Creo que están ahí, que aún las siento, que a veces me tararean. Me sé los nombres porque esos sí son míos y menos mal que no los decidí contigo, porque sino ahora estarían en la basura junto a los recuerdos rotos y yo lloraría cada vez que escuchara a una mamá llamar así a su niña. Son míos, es lo único que tuve claro, que en eso no era equitativa, porque una parte de mí siempre ha tenido tan presente que todo dura casi nada y que yo las iba a parir y por eso yo las nombraba. También porque mi nombre nunca me gustó y en parte no entiendo cómo a mis padres se les ocurrió joderme así el recreo, pero cuantos niños en el mundo hemos aguantado bromas de mierda, porque ni siquiera eran originales, por tener los nombre que tenemos. Un brindis por todos vosotros, os entiendo. Pero a ellas, los mejores, los que sé que no tienen rima fácil ni ocurrencia, los que sé que son preciosos, como iban a ser ellas porque tú lo eras. Tenía toda la fe del mundo en tu genética porque la mía es defectuosa, un poco rara, bastante poco bonita. Quería que ellas fueran una calcamonía tuya, muy sangre de tu sangre, con el mismo azul mar, cielo y cobalto en la mirada. Me las tengo que arrancar porque a veces resuenan sus risas, las carcajadas que iban a romper todos los silencios, llenar de luz y vida los columpios. Iban a ser cuatro y tú me mirabas con cara de son jodidamente demasiadas. Pero te imaginaba llegando a casa vestido de traje porque tu trabajo, ya sabes. Ellas iban a estar esperándote en la entrada y se iban a avalanzar sobre ti, y tú, tú las ibas a querer como se quiere cuando no se tiene miedo, con el corazón abierto, las tiritas preparadas, el pan siempre recién hecho, con la sonrisa en llamas. Las ibas a coger por los aires y el perro enorme que también tendríamos se os uniría a la piña y formaríais una foto en blanco y negro para siempre en mis retinas, mi pequeño clan, mi paraíso. Eso ibais a ser. Y yo sería su guardiana, su puerta acorazada, su cocinera, contacuentos, jugadora de juegos imposibles, exploradora de los bosques de ciudad, compañera de baños, de deberes y de cenas, conductora de furgoneta vieja, taxista del día a día, peluquera, costurera, enfermera, su mamá osa. Y yo habría sido tu guardiana, tu amiga, tu partner in crime, tu amante bandida, guerrera en tus batallas, la que te cubriría las espaldas, compi de conciertos, de cine, de manta.

Compi de todo lo que ya no fue más.


Tengo que arrancarme del vientre las cuatro niñas que iba a tener contigo. No, no renuncio a mi maternidad latente, a mis ganas de dar vida, de limpiar, de peinar, de curar, de acunar, de sanar, de escuchar, de arropar, de inventar, de empezar, de bailar, de comprender, de cuidar eternamente. No renuncio. Pero ya no serán ellas. Serán otras si es que son, si es que al final lo consigo. No tendrán tus rizos ni tus ojos índigo. No serán nuestras. Serán mías. Y el cambio de pronombre atraviesa mis heridas, las abre, las hace más carmín, más casquería.

Por las niñas que no tuvimos.
Copa al suelo.



Thursday, March 21, 2019



El miedo que me da otra piel en llamas.
El vértice de una espalda temblando,
tocar el infinito en otros labios.

El miedo que me da la inmensidad de un tal vez,
la posibilidad que esconde un todavía.

El miedo que me dan,
la jaula y la ventana,
el minuto de descuento,
todo eso que hay detrás de un nuevo hola.

No sé ser lo que quieren que sea ahí fuera.

Y cada día vuelvo a tropezarme con esta versión ajada de mi misma que sólo sabe dolerse y se desmorona y se hace polvo. Entre harapos de otro tiempo y estas dudas, sigo siendo ese desastre que temieron.

Respiro hondo,
intentando esconder el miedo bajo una sonrisa fingida.
Que el tiempo pasa y la vida baila y todo es de color.
Pero aquí dentro es invierno.

Me destrozaron.
Y luego yo le destrocé.
Ya no quiero más dolor en ninguno de mis huesos que no sea mío.

Pero si vale la pena,
me tiro.





Wednesday, March 20, 2019

Tengo la idea equivocada de querer.

Yo quiero a bocajarro, como lluvia torrencial, huracán de fuego. 
Con todas mis verdades descubiertas, con todas las yemas de mis dedos.

Quiero con ternura incandescente, con ganas de llenar el ahora de infinitos, cubrir de algodón las hemorragias, besar con lengua de azúcar las heridas.

Quiero sin que me importen los pasados, sin preguntas imposibles, sin pedir nada de vuelta. Quiero así, con cerezos en la risa, con luna llena en las pupilas.

Quiero de forma irreverente y atrevida, sin ponerme diques, siendo océano y cataratas de locura, saltando en los charcos, dejándome llover. En los días malos y en los peores, cuando todo se ve negro y hasta helado, vengo con cerillas y mantas de colores, te pongo el arco-iris en las manos. Soy la chica de los post-its, la que compra chucherías, la que intenta acariciar los bordes punzantes con las manos, aunque me corte, aunque el filo me haga sangrar. Soy la ingenua, la que dibuja corazones en el cielo, la que imagina amaneceres de legañas y sonrisas remolonas, la que espera que lo bueno tiene que llegar. Y joder, quiero regalando el corazón en cada gesto, abriendo los brazos, dejando entrar, partiéndome la camisa, rajándome el abdomen. Porque querer es celebrar esa existencia, entender la diferencia, acariciarla. Ser capaz de dejar atrás los miedos, quitar a las puertas los pestillos, incendiar el aire.

Yo quiero así: con todo. Y pensaba que era la única manera.
Pero si nadie me ha querido nunca de esa forma será que estoy equivocada.




Thursday, March 14, 2019

Quise ser y fui
compañera en el asfalto.
Los dientes de león estaban por todas partes
y el mar siguió guardando los secretos más nuestros.
Qué altas estaban las ramas de los árboles.
Pero teníamos el tiempo y la tierra.
La luna en lo más alto haciéndonos cosquillas.

Teníamos la luz, las espadas de madera,
el intento de volar,
y era tan nuestra la alegría que parecía que el mundo siempre iba a ser así: extremedamente fácil.

Qué ilusas fuimos,
pequeñas futbolistas de porterías de chaqueta,
las ciclistas que siempre se rajaban las rodillas,
artistas que pintaban con tiza tonterías.
Que entonces no lo eran.

Y la lluvia nos venía a recordar la importancia del refugio, del ven que yo te tapo, del corre, joder, corre no ves que nos mojamos, pero nos daba tanto igual. Nos importó una mierda.

Porque no teníamos normas ni reglas, no teníamos el tápate más, el súbete la falda, el peínate mejor, el así no estás presentable. qué coño me importaba, si yo solo quería el balón y el infinito, ser como todos ellos, india y vaquera, pistolas invisibles, balón prisionero, todos a una, el escondite, no había diferencias, no las había, porque el más rápido llegaba y nos salvaba, y si alguien se la quedaba demasiado tiempo era siempre democracia, había que cambiar. Y nada de trampas.

Pero éramos, éramos una piña, coches y muñecas, todos con las piedras, las latas, por qué tuvo que cambiar, por qué crecer y a la mierda, por qué.

Empezar a ver que ellas tenían más pecho que yo, empezar a darle importancia, 11 años, 12 años, los chicos, tener que ser algo, no sabemos qué pero algo, las broncas, problemas con amigas, rivalidades, no seas así, no grites, no seas mal hablada, esos pantalones no, pero me gustan mama, no, con eso no sales, y no salías. Pero te cambiabas en el portal porque rebeldía, el niqui en el buzón, hacer piruetas, querer ser leona y que te pusieran rejas. Tanto tanto tanto llevamos tatuado en los oídos y en el tórax, porque joder, dolía.

Toca desaprender, empezar a volver a crear islas en las que todo es posible porque salimos volando en barco y llegamos a hacernos amigas del cocodrilo, bailando como antaño alrededor del fuego. Toca desaprender, escuchar nuestros latidos, qué queremos ser, cómo queremos caminar, si no quiero tacones no quiero tacones, pero si los quiero me los pongo y que suene que piso, porque si hay que sonar sueno, la Mala, la Gata, la guerra, las palmas, y todo lo que soy gracias a ellas. A todas. Por ser compañeras de viaje, compartiendo maletas, kleenex en los baños, rimmel, pintalabios, todas las penas en una noche de alcohol que a pesar de todo terminó bailando. Y bailamos.


Y sólo me sale decir, cuando ya casi no tengo palabras, que la niña que fui sigue en mí y quiere horas de recreo, de juego sin preguntas, porque a los niños no les importa, ven, juega, y por favor, todas las manos, todos los ojos, todas las pieles, ser más pájaro, volar, dejar de mirar desde el odio, desaprender todo lo que sobra y no hace falta, y gracias papa, por no decirme nunca nada sobre mis vestidos.



Tuesday, March 5, 2019

recuerdo campos de trigo interminables,
lluvia torrencial,
explosiones planetarias.

no sé qué tiene tu pelo que todavía.

Madrid no nos hace coincidir.
tengo flashbacks maravillosamente nítidos
hacia tu risa.
estás en alguna parte
a la que yo nunca llego.

no pasa nada.
doble sentido.

querer volverte a ver con esta fuerza.
esta urgencia intermitente
que a veces se enreda en mis dedos
en noches en las que quizá alguna palabra.

querer volverte a ver.
esa es la osadía.

tienes no sé qué y casi de todo,
trigales en tu pelo,
estrellas en tus ojos,
y esa sonrisa que hace palidecer a los neones.
qué hago yo con eso.

dónde te meto,
tu idea,
tu esencia.
la forma en que te veo ser tras la pantalla,
tus amigos y tu forma de quererlos,
esa vida que te late como a nadie.

estoy escribiendo con tu piel en mis retinas
y eso me acojona tanto que no tengo cojones.
y me acerco cual cervatillo por esas redes que nada dicen,
que no son realidad
sólo placebo.

pero es un amago de rozarte que me ayuda cuando ya no puedo contener el anhelo,
las ganas de.

todo pasó y no pasó nada.

siglos.

tu sonrisa es de otro mundo.




Tuesday, February 19, 2019

los números de las habitaciones van de mayor a menor. no me gustan las baldosas del suelo pero los pasillos son anchos. hay mucha gente. mucha gente andando. mucha gente enferma, herida, recuperándose del daño. las familias de gitanos vienen enteras. pueden llegar a ser hasta 15 personas. clanes. esa forma de vivir. ves muchas cosas. diferentes pacientes con diferentes historias. hoy he visto a un señor con grapas en toda la parte delantera de la cabeza. unidad de Ictus, neurocirugía. me ha dado impresión. otra señora tiene grapas en la parte izquierda de la cara y tiene mal un ojo. pero andan y hablan, están saliendo. mi padre está en otra unidad. no le funcionan los riñones porque no se dieron cuenta en la analítica de octubre de que algo no iba bien. todo se trata de saber mirar, de ver. cuando llegué y le vi ahí, tumbado en una cama de hospital, débil, frágil, se me cayó el alma a los pies. era como si de repente estuviéramos naufragando. él es mi roca. si la roca se tambalea no tengo a donde agarrarme. pero lo que es más importante, ¿a qué se agarra él si yo me caigo? tengo que ser fuerte. lo estoy siendo. nada de llorar delante de él, nada de hacerle preguntas de hipocondríaca loca, nada de anticiparme. respirar. hacer crucigramas juntos, leer, hablar de cosas del día a día. los médicos son majos. las enfermeras y las auxiliares son increíbles. cuánto admiro esas profesiones. de verdad. están haciendo que parezca más fácil. le noto más tranquilo. pero se aburre y sé que quiere salir y que no le gusta verse así. intento que me cuente qué piensa pero no me dice gran cosa. no sé si tiene miedo. yo sí lo tengo. pero intento no pensarlo porque los médicos dicen que está mejorando. pasito a pasito. tranquilidad. nunca supe tener paciencia. mi padre sí. al menos conmigo. ahora si me pongo mal no puedo llamarle a él. respiraré. contaré hasta diez. podré con lo que sea. vienen amigos a verle. hacen bromas y él se ríe. eso me tranquiliza. está muy bonito cuando se ríe. le dejan bombones y se los zampa. es como yo, somos de dulce. es buena señal, el apetito. y cada día un poco mejor. cada día un poco más cerca de curar el daño. al 30%. y si no se hubieran dado cuenta. no quiero pensarlo. no quiero. 

hay muchas cosas que no nos enseñan en el colegio. por ejemplo ésta. cómo afrontar el día en que ves enfermo a tu padre. cómo fingir la sonrisa mientras empiezas a cuidarle. me viene, sin querer, la imagen del día en el tanatorio cuando se murió mi abuelo. entró mi tío y los dos se abrazaron. fue la primera vez que le vi llorar. el corazón me dió un vuelco y quise ser de algodón para curarle. ahí supe que los padres también se rompen. pero eso yo no lo sabía. nadie me lo contó.

ahora él está roto y yo no tengo el poder para arreglarle. y me duele. y en el paso cotidiano de los días intento ser el tronco donde se pueda apoyar. porque él no sabe nadar pero el agua es mi elemento.



Monday, February 4, 2019

estaban sentados en uno de los bancos de madera de los jardines que daban a la plaza. él fumaba mirando al cielo. ella se miraba los pies. era algo que siempre hacía cuando estaba muy nerviosa y se sentía incapaz de hablar o de mirar a la cara a la otra persona. su estómago era una lavadora centrifugando y le sudaban un poco las manos. ¿por qué era todo tan difícil a veces? no, difícil no era la palabra. ¿enrevesado? ¿lioso? sí, algo así. sabía lo que quería decirle, era muy consciente de ello, pero, de repente, le pareció que era la peor idea de la historia del mundo. lo haría de todos modos, para algo le había llevado ahí. pero saldría corriendo ¿no? seguramente. era lo más probable. dios, que nervios y que vergüenza. levantó la mirada de sus pies y le miró. él seguía mirando al cielo. al sentir que ella le estaba mirando se volvió hacia ella, expectante. era el momento. bueno, tampoco era tan terrible, ¿no? al fin y al cabo no le iba a matar o a torturarle. era sólo decirle una cosa. ¿pero cómo se le dice eso a alguien? sin pensar. venga, 3, 2, 1...
- te quiero. 
todo estaba en silencio salvo el píar de algunos pajarillos que rondaban por allí. hacia viento, eso sí, y las ramas de los árboles se movían un poco. sintió como que aquellas dos palabras habían sonado demasiado, como si hubieran sido un poco descaradas, barriobajeras. pero ya estaba, se lo había dicho y una vez que se dice ya no se puede borrar. no era como cuando borrabas los tachones del boli con el Tipex. esto era meter la pata y respirar, un "si te pica te rascas" como una catedral. vaya lío. él estaba mirándola, no sabía si con cara rara o con cara de flipado, pero no era su cara habitual, eso estaba claro. había dejado de darle caladas al piti y la ceniza se le estaba acumulando. qué desastre. se iba a ir corriendo seguro. tenía que decir algo, intentar arreglarlo, o al menos hacerle entender que no era tan terrible, que sólo era eso, que no pretendía nada de nada, que la Tierra iba a seguir girando igual y que no iba a caerse el cielo. respiró.
- sí, te quiero. y eso no significa que te esté pidiendo matrimonio, o que quiera que seamos novios, ni siquiera significa que tengamos que volver a vernos. sólo significa eso, que te quiero. es sencillo en realidad, ¿sabes? es la expresión de un sentimiento. es como cuando le dices "aprende a conducir" al coche que te da por detrás, o "te odio" a tu amiga cuando te deja mal delante de desconocidos. es algo así ¿no? decir lo que sientes. sólo eso. no tiene ninguna lectura más, no va con segundas, no implica nada. no significa nada más allá de lo que significa. necesito que eso lo tengas claro porque es así como lo veo yo, que es sólo eso. no sé si me entiendes. igual no. pero es sólo eso. 
cogió aire profundamente. volvió a mirarse los pies. él seguía ahí parado y ella ya no quería hablar más, era como si se hubiera quedado sin aire.  sentía que todo lo que le decía eran tonterías y que sólo iban a confundirle más. no quería eso. la verdad es que a veces se expresaba muy mal, era como que las palabras no le servían mucho. no sabía muy bien qué hacer, pero al final optó por levantarse al ver que él no hacía absolutamente nada y tampoco abría la boca. le miró, susurró un "adiós" muy bajito y empezó a andar hacia la plaza. entendía que podía ser un shock. ¿le habría parecido algo surrealista? quizás sí. era muy probable. a veces tenía una habilidad pasmosa para dejar a la gente flipada. ¿pero qué tenía de malo decirle a alguien que le querías? le parecía mucho más terrible decirle a alguien "me das tanto asco que cuando te veo quiero vomitar y pegarte con un bate", pero, sin embargo, los "te quiero" estaban mucho peor vistos. era curioso. ¿pero ella qué iba a hacer? si le quería pues le quería. había mucha gente que le daba mucho asco, eso también era verdad, pero él no era uno de ellos. bueno, igual ya no vuelve a hablar conmigo nunca. es bastante probable. ¿qué debería cenar? pasta, sí, y luego chocolate. a la mañana siguiente igual no se acordaría ¿no? ojalá no se acordara. bueno, pasara lo que pasara daba igual, ella ya lo había soltado. un problema menos.


Friday, February 1, 2019

Contigo volví a la adolescencia de los besos en portales, a escaleras donde el tiempo no pasa y las manos hablan solas, llegando a lo prohibido, traspasándolo. Contigo volví a la risa porque sí, a la complicidad sin artificios, a no tener que fingir. Contigo aprendí que hay personas que iluminan sólo siendo, como tú cuando llegabas y eras fuego. No hay día en que no pensara que cada vez que te reías tenías la capacidad de ser incendio, de llegar al mismo sol y de eclipsarlo. Era cuando tú no me mirabas, cuando no te dabas cuenta de que estaba aprendiéndote, memorizando cada marca que formaba tu sonrisa, el brillo de tus ojos al ser libre. Contigo volví a sentir que merece la pena esperar, pasar frío hasta las cuatro de la mañana, tener sueño porque hablar es más importante. Descubrí que podía seguir teniendo miedos pero que ante algunas caricias te haces un poco menos hielo y una parte de ti casi puede ser del todo. Contigo entendí que hay personas que piden helado de menta y chocolate y que no pasa nada, que puedes seguir mirándoles llena de admiración y ternura. También que hay momentos en los que dices "te odio, te daba de hostias hasta China" que en realidad quieren decir "no cambies en la puta vida me flipa que seas así". Contigo aprendí que hay personas que escuchan, a las que puedes contarles las cosas gordas y no se ríen, no te miran diferente. Contigo volví a la parte buena de los días, a empezar películas pero a no terminarlas, porque tu piel, porque tu espalda. Contigo quise entender los comics, saber sobre universos que yo no había visto, preguntar y preguntar hasta que te hartaras. Te vi llamarla mi vida y achucharla hasta los huesos y me derretí hasta mis espinas. Te vi tocar la guitarra con todo el esfuerzo y el orgullo de haberlo hecho tú sólo, y con toda la admiración del mundo en mis pupilas, quise que siguieras tocando para mí, cantar contigo. Como en el final de ese poema de Neruda. Igual de tonta me ponía. Y podré olvidarme de todo aunque no quiero, pero jamás se me borrará el tacto exacto de tus manos.

(Suspiro.)


Apareciste de la nada y sin avisar y de esa manera y de esa forma, llenándolo todo de ganas, y contigo volví a querer saltar, a querer coger un coche y llevarte hasta la luna, a querer volar, enseñártelo todo. Contigo, contigo volví a sentir que quería cuidar, dar mi mejor parte, ser suficiente para que, por una vez, pudiera ser legendario.





Wednesday, January 30, 2019

Todo era como volver a empezar y, sin embargo, se le hacía familiar, algo en el aire, en la contaminación color ceniza y todo aquello que no se decía parecía que venía de algo ya vivido, de otro polvo de estrellas. Todo parecía indicar que habíamos puesto el contador a cero, pero no, todos los recuerdos, todas las heridas del corazón, las cicatrices provocando la entropía y todo eso que somos que ya esta hecho jirones. El peso en la espalda era el mismo y a todo el mundo le  parecía que el brillo de sus ojos era un poco menos brillo, pero solo había que mirar bien, acercarse lo suficiente, milímetros, y entonces, la risa, la magia, volvía a ocurrir el milagro, todo eso que hacía Campanilla, gota de miel en los labios. También todo eso, todo lo que ocultan los tejados, las buhardillas, los baúles, los cajones, todo lo que nunca quisimos enseñar pero sentimos, lo que nos partió, lo que nos acuchilló el alma. Corres las cortinas y te escondes del mundo y sus mentiras, también de todo este circo que montaron. Nosotros no les dijimos que lo queríamos así, pero ellos lo hicieron y vinimos a él y en él andamos. Intentamos bailar, seguir el movimiento de las notas de la música que nos recuerda a cuando éramos chiquillos, a cuando todavía no nos importaba el fin de mes, las agujas del reloj, las arrugas en la cara, simplemente el balón, dar otra patada. Y no importaba el gol, la echábamos fuera y era igual de importante, el intento, el regate, vivir en el momento, ser. No importaba el gol, ni siquiera contábamos, sólo jugar, sólo fluir, nada de esa competencia que nos inoculan, nada de esa mierda, libertad en los pies y en las retinas.

Todo era como volver a empezar. Volver a arriesgarse.





Monday, January 28, 2019

fueron dos ojos azules y un sólo rumbo,
toda mi vida en tu espalda.

nido y madriguera,
rampa pirata y cañonazo.
caída libre y salvaje hacia un lugar desconocido
que sabía un poco a tocar el cielo.

y como sonreías.
como hacías brillar a las estrellas.

no supe, ni una sola vez de todas ellas, ponerle nombre a tus suspiros,
hacerte poesía. te me escurriste entre las manos
como agua de glaciar buscando otros paisajes,
me quedé con el pelo lleno de arena,
un desierto sin Oasis a mis pies.

y aún así, después de esta sequía milenaria,
después del para siempre destruido,
después de las heridas en la piel,
después de la escarcha,
la certeza del rocío,

te escribo con todos tus colores en mi pecho,
con las pupilas llenas de fluorescencia dilatada.
apple of my eye y esos días en el este.
París y todos tus océanos.
todas las primeras veces.

no soy ya lo que fui,
tampoco lo que fuimos.
pero te guardo donde una niña guarda la ropa de sus muñecas favoritas,
el pintalabios viejo de su madre, los peluches que tenían nombres de persona.

te guardo donde guardo al mar
y a sus sonrisas.
te guardo junto al séptimo de Harry
y los solos de batería.
junto a la música que un día bailamos
y la que ahora sólo bailo yo.

donde guardo todo lo que amo y va conmigo.