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No sé lo que era, pero era algo más. No era solo una voz, unas rimas, un flow inigualable. Era un espíritu libre, salvaje, provocador, irreverente. Te removía las putas entrañas solo con un pareado. Joder, las veces que me partí la puta caja escuchándole. Y las veces que lloré.. ¿Cómo podía conseguir eso? Iba más allá de todo, no tenía barreras, fronteras, límites. Era libre. Era la esencia. Era hip-hop en estado puro. ¿Estaba loco? Y que más da, todos lo estamos.

Y ahora sigue siendo el más grande. Pero ha perdido algo en el camino. Tantos golpes y reveses, tanta droga, tanta mierda... Y ya no es el mismo, no es lo que era. Ha perdido su parte más intensa, más auténtica, más arrolladora. Ha querido desprenderse de una parte esencial. Y ya no está entero. Pero lo más importante, es que él esté bien. Y que consiga seguir sin más dolor. Que se aleje de toda la mierda que le hizo mal en el pasado, y que encuentre el equilibrio y la felicidad que tanto necesita.

Sé que me encontraré con él siempre que le de al play. 

Así que no le perderé nunca.

En este mundo loco, en el que el estrés y la ansiedad me devoran cada día, es un alivio saber que siempre podré contar con él.

Siempre será mi constante.