Monday, October 29, 2012

.

Perdóname.
Si aún recuerdas mi nombre.
Si aún recuerdas algo mío.
Un momento.
Dos.
Infinito.
Perdóname.
Nunca me libraré de la condena.
Tú bien lo sabes.
Llevaré tu nombre siempre al lado.
Y una sonrisa apagada asomará alguna vez a mis labios.
Reflejo solitario de tiempos mejores.
De tiempos felices, mi amor.
¿Los recuerdas?
Yo siempre los llevaré conmigo.
Jamás olvidaré esos ojos marrones.
O como me gustaba hundir mi cara en tu pelo.
Y esas mañanas frías en las que paseábamos.
Recuerdo que te gustaba la nieve.
Y cuando corrías eres inalcanzable.
Perdóname.
Es verdad, no supe estar a la altura.
Tú siempre me diste mucho más.
Y esa última noche, secabas mis lágrimas.
No te gustaba verme llorar.
Ni a mi verte temblar de esa manera.
Tendría que haber llegado hasta el final.
Me arrepentiré toda la vida.
Pero si aún me recuerdas, no me odies por favor.
Recuerda, que te amé por encima de todo.
Y aún hoy te amo.
Y ten por seguro, pequeño milagro, que te amaré cada día de mi vida.
Siempre.
Siempre será infinito.
Y más allá.

No comments:

Post a Comment