Saturday, June 21, 2014

Y quizá con mis dedos en tu espalda.
Y quizá con las persianas bajadas.
Mientras el sol duerme
y la luna sale a bailar un rato
uno de esos tangos
que terminan
en la cama
en cualquier noche de verano.
Quizá, con tu mano en mi boca.
Tapando los gemidos
entrecortados
que estallan
en mitad del silencio.
Como si no tuvieran otra opción
que salir corriendo
y romper contra los átomos de aire.

Explotar.
Como si no hubiera otra opción
que sellar todas tus moléculas
con las yemas de mis dedos.
Como si la vida empezara y terminara en ti.

Éxtasis.

No comments:

Post a Comment