Thursday, May 9, 2013

Una nota.
Esa melodía inacabada.
La vibración inesperada.

El cruce de miradas,
entre tú y la pared.
El infinito encerrado entre cuatro paredes.

Las persianas están bajadas.
La luz artificial esconde
las sombras de mi alma.

No hay despertador en la mesilla,
que forré con papel de regalo,
porque no me gustaba su estampado original.

La pared, pintada de verde,
refleja el intento de traer los colores.
No sé si lo conseguí del todo.

Recuerdos a trompicones,
esparcidos por el aire que cabe
en estos metros cúbicos.
¿Cuantos serán?

Aquí no están sus ojos, no quiero meterlos,
no me gusta este lugar.

Hay rincones donde todo son buenos recuerdos,
y otros, como este,
en los que todo es poco más que soledad.

Mikele

No comments:

Post a Comment