Dieciséis.
Por él, y su sonrisa,
y ese día en que los dos me salvaron.
Son los mejores del mundo.
Junto con mi hermano,
mis amores más preciados.
Todavía recuerdo
mi cara cuando les vi
de pequeñitos,
cuando no eran más que unas bolas
sin apenas pelo.
La alegría de saber
que venían dos personas
buenas
a un mundo que a veces
es demasiado hostil.
Les quiero con todo mi alma.
Me hacen feliz.
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